Los vecinos de Villa Francia dieron el último "adiós" a quien fue considerado por los feligreses como "un poblador más". Entre globos blancos y lienzos con frases emotivas, el sacerdote fue velado en compañía de los suyos. Mañana se realizará el funeral con diversas actividades que invitan a la comunidad.
El gobierno, parlamentarios y otras figuras lamentaron el fallecimiento del llamado "cura obrero".
Dejó Chile el miércoles pasado. Prometió regresar en tres meses más para celebrar la Semana Santa, su cumpleaños número 88 y sus seis décadas de sacerdote. Pero en la Villa Francia -donde está instalado hace cuatro años- saben que el cura está cerrando un ciclo; por eso se han organizado para continuar con su legado y lo han despedido con homenajes y celebraciones. Puga, dicen, está cansado y hasta eligió a quienes hablarán en su funeral en caso de que la salud le falle. "Solo Dios sabe lo que viene", dijo él antes de tomar un avión rumbo a Filipinas.
El llamado "cura obrero" fue enfático al señalar que la Iglesia fue débil al denunciar la situación de los abusos. pero que más allá de la institucionalidad, la Iglesia se compone de una capa de hombres y mujeres que sirven.
Desde la emblemática población, donde se termina un enorme mural de bienvenida para Francisco, el "cura obrero" desmenuza los ánimos que esperan al Pontífice.
Desde la emblemática población, donde se termina un enorme mural de bienvenida para Francisco, el "cura obrero" desmenuza los ánimos que esperan al Pontífice.
El sacerdote respondió a las críticas de familiares de detenidos desaparecidos tras participar ayer en la ceremonia ecuménica en la que 10 reos de Punta Peuco pidieron perdón.
El presbítero participará en la ceremonia ecuménica de Punta Peuco, donde ocho reos condenados por violaciones a los derechos humanos pedirán perdón. Aunque admite que ha recibido duras críticas en su entorno, asegura que "cualquier cosa aporta para dar un paso más para reencontrarnos".
