Empezó a asomarse de manera sutil en solapas, cinturones y bolsillos de abrigos. Temporadas más tarde se apoderó de abrigos, pantalones, polleras, vestidos y chaquetas. Ahora, el cuero se desborda hasta el punto de estar en tenidas de pies a cabeza. De charol, natural o gamuza, este invierno es, sin dudas, uno de los materiales imprescindibles.
Revista Paula.
11 mar 2014 05:30 PM