El gobernador kirchnerista de La Rioja, Ricardo Quintela presentó recurso de amparo para que el máximo tribunal de Justicia declare la “inconstitucionalidad manifiesta” del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) de desregulación económica y dicte una medida cautelar que suspenda de inmediato su aplicación.
Desde el interior del Ejecutivo argentino le restaron dramatismo al llamado a paro para el 24 de enero de la histórica central obrera y sostienen que los líderes gremiales están obligados a dialogar. “No puede quedar como que el Gobierno gana y ellos pierden. Es política”, señalaron.
“Si me lo rechazan, llamaría a un plebiscito y que me expliquen porqué se ponen en contra de la gente”, indicó en una entrevista televisiva el mandatario argentino, quien este miércoles enfrentará una nueva protesta contra el Decreto de Necesidad y Urgencia, convocada por la poderosa Confederación General del Trabajo.
Los sindicatos y federaciones que integran la central de trabajadores trasandina alistan manifestaciones para este miércoles contra el DNU presidencial ante el palacio de Tribunales, en Buenos Aires.
El gobierno argentino prepara, además, una auditoría que abarca a más de 45 mil funcionarios del Estado. En principio se les renovará el contrato por 90 días, mientras se avanza con el procedimiento administrativo y se define si son puestos que se mantendrán en el nuevo organigrama fiscal.
El decreto que llevará la firma del mandatario argentino se publicará este martes, y forma parte de una de las medidas anunciadas previamente por el ministro de Economía, Luis Caputo. Mientras, la Casa Rosada prepara una auditoría sobre el total de la planta de funcionarios del Estado.
Gobierno argentino intenta conversaciones con sectores opositores en el Parlamento que permitan sostener el Decreto de Necesidad y Urgencias, ante la presentación de recursos judiciales que buscan frenarlo y también declararlo inconstitucional. En las primeras reuniones se estableció que el gobierno debe construir consensos y lograr apoyo para que las medidas salgan con fuerza de ley.
Con llamados a paro general y consignas como "Milei es hambre", miles de argentinos salieron a las calles de las principales ciudades del país por segundo día consecutivo para expresar su rechazo al megaproyecto del mandatario ultraliberal.
En el cúmulo de reformas también se anticipó desde la Casa Rosada una serie de privatizaciones de empresas del Estado, además de un congelamiento de los sueldos a los funcionarios estatales y también de una rebaja de salarios más altos en las reparticiones públicas.
El recurso legal fue presentado este jueves por organizaciones sindicales, economistas y una ONG, y se inserta en una "lluvia" de acciones de amparo para frenar el Decreto de Necesidad y Urgencia del mandatario argentino. El objetivo es que la Justicia argentina declare su inconstitucionalidad.
El registro fue grabado en la estación Temperley del Tren Roca en Argentina, donde se escucha un mensaje del Ministerio de Seguridad y el Ministerio de Capital Humano, sobre las medidas que tomarán en contra de los manifestantes convocados para el miércoles 20 de diciembre, en rechazo a las medidas económicas anunciadas en dicho país.
El presidente argentino, Javier Milei, tenía previsto desplazarse hasta Bahía Blanca durante este domingo, según fuentes de la Casa Rosada.
El economista considera a la de Carlos Menem como “la mejor presidencia de la historia de Argentina”, y ha puesto a muchos familiares del difunto exmandatario en posiciones de poder. Su sobrino, Martín Menem, preside hoy la Cámara de Diputados.
Economistas y agentes del mercado coinciden en que el plan anunciado es más un programa de emergencia económica que una propuesta a largo plazo, y estiman que su futuro dependerá del Congreso y de la recepción de la población.
