Estados Unidos vuelve a ser el rey de la velocidad e iguala su mejor cosecha de oros histórica, con 14. La IAAF justifica la falta de récords con un cálculo general, para destacar el nivel de las marcas.
Laura Tapia
7 oct 2019 12:29 AM
Estados Unidos vuelve a ser el rey de la velocidad e iguala su mejor cosecha de oros histórica, con 14. La IAAF justifica la falta de récords con un cálculo general, para destacar el nivel de las marcas.
El salador catarí se coronó bicampeón mundial con un brinco de de 2,37 metros, el mejor del mundo esta temporada.
La campeona nacional estadounidense paró el cronómetro en 52"16 segundos para proclamarse, ahora, campeona mundial de la prueba rompiendo su propia plusmarca.
Salwa Eid Naser se proclamó campeona en Doha sorprendiendo a la favorita, la jamaicana Shericka Jackson, con un crono que no se daba desde los años 80.
El estadounidense Holloway gana los 110 vallas mientras el jamaicano McLeod y el español Ortega se chocaban. En el martillo, el excéntrico Fajdek vuelve a reinar.
El estadounidense, de 21 años, llegaba con la mejor marca del año, pero derrotó en la pista al campeón reinante y otros favoritos.
Dina Asher-Smith coronó su primer oro en Mundiales con récord de su país para la distancia.
Antidopaje suspende por cuatro años al entrenador de siete en los Mundiales. Los campeones Brazier y Hassan, entre ellos.
Los norteamericanos dominaron tres de las cuatro finales de hoy. Ya suman 16 medallas: siete oros, siete platas y dos bronces.
En un sprint en el que siempre dominó, el ex campeón sub 20 en los 100 metros se colgó el oro con un crono de 19"83.
Los chilenos, los únicos atletas nacionales en los Mundiales de Atletismo de Doha, no consiguieron avanzar a la final de la prueba.
La sanción contra el entrenador de 61 años se produce después de una investigación de cuatro años realizada por la Agencia Antidopaje de Estados Unidos.
Los únicos dos chilenos en Doha compiten hoy en la clasificación del lanzamiento del martillo.
Bajo el calor qatarí, Halimah Nakaayi ganó los 800 metros, lejos de los cronos de la sudafricana. A una nigeriana no la dejaron competir por su nivel de testosterona.