El 6 de julio de 1996, Chile goleó 4-1 a Ecuador en una lluviosa noche en el Nacional. Fue la primera piedra del proceso que terminó con el equipo en el mundial, después de 16 años de espera. Un partido con mucha tensión, con polémicas y desahogo. La presión de los dirigentes tras el despido de Azkargorta, los problemas que tuvo el equipo en la previa del partido, la decisión de colocar a la U que estaba jugando la Libertadores, además de las pifias y el posterior corte de mangas de Fabián Estay tras anotar el tercer tanto. Tres protagonistas de esa noche en Ñuñoa: Víctor Hugo Castañeda, el PF Ítalo Traverso y el mismo Estay; relatan a El Deportivo cómo fue el debut del técnico uruguayo en el proceso eliminatorio.