En el volumen Ideas de perfil (Hueders, 2015), el abogado y columnista desmenuza los componentes que hacen singular a la obra del antipoeta.
Felipe Ojeda
5 sep 2017 11:39 AM
En el volumen Ideas de perfil (Hueders, 2015), el abogado y columnista desmenuza los componentes que hacen singular a la obra del antipoeta.
Artículo publicado originalmente bajo el título de "Declaración preliminar" en 13 poetas chilenos (Valparaíso, 1948) de Hugo Zambelli.
En Interrupciones (Hueders, 2016), Matías Rivas, poeta y director editorial de Ediciones UDP, traza un personal diario de lecturas en donde disecciona a autores como Roberto Bolaño, Enrique Lihn y —a quien nos convoca— Nicanor Parra.
En 2015, La Tercera visitó al viejo poeta más joven de Chile en su casa de Las Cruces, donde habló de corrupción, terrorismo y de su hermana Violeta.
Es fácil leer a Parra como un humorista, aunque ese quizás sea su gran engaño. Desde Poemas y antipoemas hasta Hojas de Parra, desde sus Artefactos hasta los Discursos de sobremesa, el humor de Parra es cualquier cosa menos humor.
Nicanor Parra tenía 26 años cuando escribió René Descartes, tesis con la que optó al grado de profesor de Matemáticas y Física. El libro no está en el registro de sus Obras completas, pero en él encontramos las primeras señales de lo que sería la voz de la antipoesía. Esta es la historia de ese libro.
La lectura de los textos de Nicanor Parra en los que habla un anciano, sea el fervoroso Cristo de Elqui o un viejo cualquiera, hay claves ineludibles para entender la compleja intensidad con que se vive la cercanía del final.
Hace dos semanas estuvo nuevamente en su hogar ubicado en la calle Julia Bernstein. El antipoeta, quien este martes cumple 103 años, vivió ahí tres décadas, antes de instalarse en Las Cruces. Allí se hospedó Allen Ginsberg, crió a sus hijos, vio por última vez a su hermana Violeta y le dio forma a los Artefactos. Hoy sus nietos recuperan el lugar.
Hace dos semanas estuvo nuevamente en su hogar ubicado en la calle Julia Bernstein. El antipoeta, quien este martes cumple 103 años, vivió ahí tres décadas, antes de instalarse en Las Cruces. Allí se hospedó Allen Ginsberg, crió a sus hijos, vio por última vez a su hermana Violeta y le dio forma a los Artefactos. Hoy sus nietos recuperan el lugar.
Fue en un momento de fragilidad de la salud de su abuelo Nicanor Parra que Cristóbal Ugarte Parra (24), Tololo, el más cercano de sus nietos, tuvo la intuición de que la torre del clan estaba cerca de desmoronarse. Esa sensación vertiginosa lo llevó a indagar en sí mismo y así surgió Pérdida total, su segundo disco que lanzará el 1 de septiembre. De este proceso, y de cuánto pesa ser parte de ese linaje, habla en esta entrevista.
A dos meses de cumplir 103 años, el poeta más longevo de América Latina regresa a librerías con El último apaga la luz, una selección que recorre su obra desde Poemas & antipoemas y rescata textos dispersos. Editado por Matías Rivas, el volumen de más de 400 páginas ofrece una gran panorámica de su evolución creativa y de sus obsesiones: el amor, el sexo, la muerte, la política y la religión, entre otras. El libro llegará también a España, Argentina, México y Perú.
A dos meses de cumplir 103 años, el poeta más longevo de América Latina regresa a librerías con El último apaga la luz, una selección que recorre su obra desde Poemas & antipoemas y rescata textos dispersos. Editado por Matías Rivas, el volumen de más de 400 páginas ofrece una gran panorámica de su evolución creativa y de sus obsesiones: el amor, el sexo, la muerte, la política y la religión, entre otras. El libro llegará también a España, Argentina, México y Perú.
Así describió Nicanor Parra el sonido de Pérdida total, el primer disco donde Tololo, su nieto, saca la voz. Esta es la crónica del día en que el hijo de Colombina Parra de Los Ex! y Pablo Ugarte de Upa! decidió mostrar sus propias canciones.
Matiás Rivas habla sobre las fricciones entre su amigo, Rafael Gumucio, y los escritores jóvenes, sobre el milagro de llevar 15 años casado, su relación con el porno, su desprecio por quienes se sienten dueños de la verdad y de lo excluido que se siente por el Frente Amplio por ser de una generación mayor.
El 23 de marzo de 2001, poetas de todas partes del planeta aterrizaron en Santiago para "allanar Chile y bombardear con poesía La Moneda", como explicó el entonces presidente Ricardo Lagos.