Francesca García Delgado
26 oct 2024 06:00 AM
En los últimos 34 años, todos los mandatarios que fueron elegidos con voto popular se han visto involucrados en diversos procesos de corrupción y otros delitos.
El exmandatario fue declarado culpable en los delitos de colusión y lavado de activos para favorecer con contratos a la empresa Odebrecht por la construcción de los tramos 2 y 3 de la carretera Interoceánica Sur que une a Perú con Brasil.
Venia estadounidense ocurre un día antes de ue se dicte el veredicto contra el exmandtarario por un caso de corrupción en la adjudicación de obras públicas a favor de la constructora brasileña Odebrecht.
Un juez de la Corte Suprema de Brasil declaró este martes "la nulidad absoluta" de todos los actos judiciales realizados durante la operación anticorrupción "Lava Jato" contra Marcelo Odebrecht, expresidente del gigante de la construcción.
Las investigaciones contra el exgobernante entran a su última etapa, y podría recibir una condena de hasta 35 años. Otros dos exmandatarios peruanos están presos.
Jorge Barata admitió el jueves en un juicio que la compañía financió las campañas de Alan García, Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski, a cambio de obtener licitaciones públicas. Dijo que la firma también aportó dineros a la campaña de Keiko Fujimori en 2011.
El exmandatario está acusado de recibir unos US$ 35 millones a cambio de licitar a favor de la empresa brasileña Odebrecht el proyecto de construcción de los tramos 2 y 3 de la Carretera Interoceánica.
Con la llegada del exmandatario a Lima durante la mañana del domingo, solo un destino estaba previsto para su reclusión luego de que Estados Unidos lo extraditara: la cárcel de Barbadillo. Pero no estará solo. El mismo penal es habitado por el recientemente destituido Pedro Castillo y Alberto Fujimori, rival de Toledo en las históricas elecciones de 2000. Ollanta Humala también cumplió prisión preventiva en ese recinto entre 2017 y 2018.
El expresidente peruano arribó al aeropuerto Jorge Chávez de Lima, escoltado por la policía local.
El exmandatario peruano se entregó ayer a las autoridades de Estados Unidos a la espera que comience su proceso de extradición a su país, por un caso de colusión y lavado de activos por más de US$ 30 millones.
El expresidente peruano Alejandro Toledo (2001-2006) es reclamado por la justicia peruana desde finales de 2017, está imputado por la presunta comisión de los delitos de lavado de activos, colusión y tráfico de influencias con relación a contratos concedidos a la empresa Odebrecht para la construcción de la Ruta Interoceánica entre Brasil y Perú.
El juez Thomas S. Hixson de San Francisco ordenó al expresidente peruano, que ha estado bajo arresto domiciliario, que se entregue el viernes a los agentes del Servicio Federal de Alguaciles en San José.
La Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de California desestimó el pedido de la defensa del exmandatario, por lo que el juez Thomas Hixson ordenó a Alejandro Toledo entregarse este viernes. Sin embargo, habría presentado dos nuevos recursos para evitar su repatriación.
El expresidente está acusado de aceptar unos US$ 35 millones en sobornos vinculados a la construcción de una autopista entre Brasil y Perú. Los fiscales peruanos lo demandaron por confabulación y lavado de dinero y su país busca extraditarlo desde 2018.