El partido de ultraderecha Alternativa para Alemania dobla la cantidad de votos obtenidos en elecciones anteriores y se posiciona como segunda fuerza mayoritaria en el Parlamento alemán, con 152 asientos.
Natalia Molina H.
24 feb 2025 06:19 PM
El partido de ultraderecha Alternativa para Alemania dobla la cantidad de votos obtenidos en elecciones anteriores y se posiciona como segunda fuerza mayoritaria en el Parlamento alemán, con 152 asientos.
Tras las elecciones del domingo, algunos análisis en la prensa internacional para explicar la caída de los socialdemócratas del canciller Olaf Scholz apuntan a una mala gestión económica, así como un desencanto con los partidos tradicionales. De hecho, los extremos del arco político crecieron hasta casi duplicar sus asientos parlamentarios en comparación a 2021.
A Friedrich Merz, líder de los conservadores, se le considera la antítesis de la ex canciller conservadora Angela Merkel,
La ministra del Interior, Nancy Faeser, dijo que iban a averiguar qué medidas habían tomado las autoridades en respuesta a varias pistas sobre Taleb al-Abdulmohsen, el disidente saudita de 50 años acusado de matar a cinco personas y herir a otras 200.
Con el rechazo del Parlamento a la cuestión de confianza impulsada por el propio canciller socialdemócrata, Alemania se abre a un nuevo proceso electoral para conformar el Parlamento Federal y, por tanto, un nuevo gobierno. Allí, Friedrich Merz, de la Unión Demócrata Cristiana, de la CDU, aparece como la carta mejor perfilada para convertirse en el sucesor de Olaf Scholz, según encuestas.
La introducción de miles de tropas norcoreanas provocó un cambio en el cálculo de Biden.
“Era importante decirle (a Putin) que no puede contar con que el apoyo de Alemania, Europa y muchos otros países del mundo”, declaró Scholz a la prensa.
La semana pasada, la mayor economía de Europa se vio sumida en el caos con la ruptura de la coalición tripartita de Scholz.
El acto central del 9 de noviembre de 1989 tuvo lugar con jóvenes de varios países europeos y representantes de movimientos internacionales, quienes colocaron rosas y encendieron velas en memoria de quienes fallecieron en el muro.
Según los sondeos a boca de urna, el SPD, que gobierna el estado que rodea a la capital Berlín desde la reunificación en 1990, obtuvo el 31,8% de los votos, por delante del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania, con el 29,2%, en una remontada de último minuto.
No es azaroso que un político declarado culpable en dos ocasiones por utilizar retórica nazi haya logrado un histórico triunfo para la extrema derecha. Tampoco lo es que una colectividad al otro lado de la vereda, liderada por una exintegrante del Partido Comunista de Alemania Oriental, creciera considerablemente en las elecciones en Turingia y Sajonia. Si bien hay matices, los une su política antiinmigración, su rechazo al apoyo a Ucrania y la cercanía con el Kremlin.
El canciller alemán afirmó que “el fin de la guerra en Gaza sería un paso crucial hacia la desescalada regional”.
El encuentro entre los dos líderes, de tendencias y estilos políticos claramente dispares, comenzó con la llegada de Milei en automóvil y una breve sesión fotográfica, en la que ambos se saludaron con un apretón de manos.
La economía, la inmigración y los conflictos internacionales fueron las mayores preocupaciones de los electores, sugieren los datos de los principales países del bloque. En tanto, la decisión del presidente francés de adelantar las elecciones es vista como una estrategia bien calculada o un suicidio político.
La decisión fue comunicada esta jornada por el canciller federal de ese país, Olaf Scholz, en el marco de una reunión bilateral que sostuvo con el Presidente Gabriel Boric.