Inspirada en Santa María Eufrasia, la monja francesa que liberaba esclavas, Nelly León trabaja hace 20 años en cárceles de mujeres. Su principal tarea consiste en escucharlas, y esa experiencia, dice, le ha ayudado a entender dos cosas: por qué terminan presas y por qué el resto de la sociedad prefiere no saber mucho de ellas. Una indiferencia que también le duele en su versión piadosa, propia del elogio que más recibe y más le molesta: "Qué linda su obra, madre".
Por Daniel Hopenhayn
5 oct 2019 11:40 PM