Durante casi dos años Ramiro Lavín vivió en el país más hermético del mundo. Pese a las restricciones del régimen, no sólo logró documentar a través de fotografías la vida de los norcoreanos, sino también se instaló con el primer bar del área diplomática de Pyongyang. Aquí relata su experiencia.
Alejandra Jara
6 sep 2017 06:20 PM