El hallazgo de seis rehenes muertos en la Franja de Gaza ha provocado la convocatoria de una huelga general para presionar a Netanyahu.
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“Hace más de dos meses que está sobre la mesa un acuerdo para devolver a los rehenes. Si no fuera por la locura, las excusas y las vueltas, los secuestrados de cuyas muertes nos hemos enterado esta mañana probablemente estarían vivos”, ha declarado el Foro de Familias de Secuestrados y Desaparecidos en su cuenta de la red social X.
El conocimiento de las muertes de los seis rehenes ha desatado una tormenta de protestas contra el Gobierno israelí.
Familiares y grandes compañías del país comienzan a plantear una huelga general para forzar el retorno de los secuestrados.
Este sábado se registró una nueva protesta para exigir la liberación de rehenes secuestrados en la Franja de Gaza.
Qaid Farhan Alkadi, de 52 años y miembro de la comunidad beduina del sur de Israel, fue trasladado a un hospital y su estado de salud es normal.
“Aquí todo el mundo conoce una verdad muy sencilla: Hamás es el único obstáculo para liberar a todos nuestro rehenes”, ha manifestado Netanyahu al principio del Consejo de Ministros de este domingo.
El portavoz y miembro del buró político del Movimiento de Resistencia Islámica, Osama Hamdan, aseveró que la operación israelí de rescate de cuatro rehenes del pasado sábado en el campo de refugiados de Nuseirat, que se saldó con más de 270 palestinos muertos, acabó también con la vida de otros tres secuestrados.
The Washington Post reconstruyó, en base a más de una docena de entrevistas, la operación de rescate del sábado que liberó a cuatro rehenes israelíes y mató a más de 270 palestinos.
La medida de Benny Gantz tiene como objetivo forzar elecciones anticipadas, pero podría complicar el esfuerzo diplomático de Estados Unidos para poner fin a la guerra en Gaza.
La oficina de prensa del Gobierno de Hamas en Gaza ha precisado que entre los fallecidos hay 64 niños, 57 mujeres y 37 ancianos.
Guterres también ha hecho un llamamiento para la liberación “inmediata e incondicional de todos los rehenes” y para “el fin de la guerra”, en la que han muerto ya más de 36.800 palestinos en la Franja de Gaza por la ofensiva del Ejército israelí tras los ataques de las milicias palestinas.
Tras conocerse la noticia, cientos de israelíes salieron a las calles de Tel Aviv para exigir un acuerdo para la liberación de los cautivos que permanecen en Gaza, aumentando la presión sobre el gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu.
El Presidente de Estados Unidos le pidió a Hamas que acepte la propuesta, que incluye la liberación gradual de los rehenes israelíes y "una gran operación de reconstrucción" de la Franja de Gaza.
“Aunque Israel ha desestimado llamados de la comunidad internacional para aliviar la situación en Rafah, el clamor mundial de un cese inmediato de esta ofensiva se ha vuelto demasiado fuerte como para ignorarlo”, dijo Martín Griffiths, la máxima autoridad de temas humanitarios de Naciones Unidas.
