A 40 años de su estreno en Chile, la obra de Alejandro Sieveking, vuelve a las tablas más provocadora que nunca. Esta vez la dirige Pali García, que puso a dos hombres en el papel de las hermanas que se disputan a un mismo pretendiente. "Lo hice para extremar la ferocidad de los roles femeninos", dice.
slehuede
11 jun 2011 09:00 AM