Esta receta alemana no sólo sirve para hacer dulces para la hora del té.
slehuede
7 mar 2012 11:18 PM
Esta receta alemana no sólo sirve para hacer dulces para la hora del té.
Otra de las tantas virtudes de las sopas es que promueven la imaginación y la economía familiar.
Una receta típica de la cocina francesa: elegante, pero con ingredientes fáciles de conseguir.
La palta es un gran aliado para preparaciones dulces y saladas.
Elige los camotes que tengan buena forma; ya que los que están dañados y blandos, afectan su sabor.
Lo mejor es marinar el quesillo en aceite de oliva aromático, para darle más sabor a esta preparación.
El pumpernickel es un tipo de pan de cereales integrales, originario de Westfalia, en Alemania.
Los ostiones tienen un alto nivel nutritivo y le dan un sabor muy especial al clásico arroz blanco.
El tofu tiene una consistencia parecida al queso fresco y se prepara de la leche del poroto de soya.
Antiguamente llamado alcuzcuz, es un plato originario de Marruecos, hecho a base de sémola de trigo.
Para acentuar el sabor de esta receta, se utilizan champiñones frescos y también callampas secas.
El particular color de este risotto se logra con tinta de calamar, que se agrega casi al final de la preparación.
Este cerdo se aromatiza con una mezcla de azúcar, clavos de olor, salsa de soya y salsa inglesa.
La presentación de una ensalada es la clave para hacer de ella un plato único, sobre todo al dársela a los niños.
Esta es una clásica preparación española, muy similar a la tradicional sopa de cebollas gratinadas.