Onemi informó que a partir de este miércoles y hasta el sábado 9 de febrero se prevén precipitaciones del tipo chubascos y tormentas eléctricas en los sectores cordilleranos y precordilleranos de la Región de Antofagasta.
Los lectores de Conde Nast Traveler votaron por los mejores destinos del continente, donde Buenos Aires se llevó el primer lugar.
El ministro de Economía manifestó que si no se presenta una nueva emergencia climática el día sábado se podrían tener abiertos todos los lugares turísticos.
Tas un intenso catastro en terreno, ministro Longueira anunció la reapertura de la mayor parte de los atractivos turísticos de la zona afectada por el aluvión del día domingo.
Así lo adelantó la alcaldesa de San Pedro de Atacama, Sandra Berna, quien agregó que los militares comienzan esta mañana a armar las casas provisorias.
El ministro del Interior Rodrigo Hinzpeter confirmó que los titulares de las carteras de Economía y Desarrollo Social viajan durante esta jornada a San Pedro de Atacama. El ministro de Obras Públicas también se sumó a la actividad.
El sector de Toconao fue afectado por un aluvión y permanece sin servicios básicos. Hasta ahora no se reportan personas fallecidas.
Los afectados corresponden a daños por conectividad, daños en vivienda y suministro de servicios básicos, según informó Onemi.
Las precipitaciones en la región de Antofagasta provocaron el desborde del río Salado y otros afluentes. Tres pasos fornterizos permanecen cerrados y no hay servicio básicos en la zona cordillerana.
Durante las últimas 26 horas se ha registrado un aumento de la actividad del macizo en la Región de Antofagasta.
Diseño innovador, buena gastronomía y servicio personalizado. Aquí, un recorrido por algunos de los mejores hoteles cinco estrellas de San Pedro de Atacama.
Según el Servicio Sismológico de la Universidad de Chile, tuvo una magnitud de 5,6 grados en la escala Richter.
Las viviendas fueron dañadas por las lluvias que afectaron a la región en febrero pasado.
El movimiento se registró en la zona de Socaire, al sureste de San Pedro de Atacama, y tuvo una profundidad de 239 kilómetros.
En una primera etapa las obras se concentrarán en el retiro del barro y material de arrastre acumulado en el canal.
