El principal portavoz de Zelenski, Mijailo Podoliak, ha asegurado que Crimea es “un gran campamento y almacén militar, con cientos de objetivos militares directos”, que Rusia intenta ocultar entre su propia población civil, a la cual ha definido como “ocupantes”.
El pasado viernes, tanto Kiev como Moscú confirmaron el ataque sobre estas instalaciones situadas en la ciudad de Sebastopol, en plena península de Crimea y que quedaron parcialmente destruidas.
Funcionarios ucranianos, que han reivindicado otros operativos recientes a Crimea, no anunciaron de inmediato que Kiev era responsable de este ataque.
El gobernador de la ciudad rusa, en la península de Crimea, Mijail Razvozhaev, señaló en su canal de Telegram que “los enemigos atacaron Sepastopol” y que las “defensas aéreas han funcionado”. Medios ucranianos indicaron que el objetivo del ataque ha sido una planta de reparación de barcos.
El alcalde de Sebastopol, Mijail Razvozhaev, indicó que la Armada rusa ha derribado dos vehículos aéreos no tripulados que tenían armas pequeñas, mientras que “varios drones más” fueron atacados.
Tanto Turquía como Naciones Unidas iniciaron conversaciones el domingo para lograr que Moscú regrese a la iniciativa, que ha permitido que más de 9 millones de toneladas de cereales salgan de forma segura de los puertos ucranianos.
