Un nuevo libro de Deirdre Barrett, sicóloga de la Universidad de Harvard, muestra que el confinamiento y la incertidumbre han hecho que los sueños se vuelvan más vívidos. En estas experiencias se repiten patrones como el miedo a infectarse, quedarse abandonados en lugares desiertos y sufrir ataques de bichos venenosos o, incluso, zombis. Pese a la ansiedad que revelan estos escenarios, hay técnicas que permiten controlar su impacto.
14 ago 2020 06:00 PM