El gobierno dijo hoy que la mayoría falleció ahogada. El número de provincias afectadas llega a 17.
AP
20 nov 2011 08:08 AM
El gobierno dijo hoy que la mayoría falleció ahogada. El número de provincias afectadas llega a 17.
La secretaria de Estado de EEUU, visitó en la capital, Bangkok, un centro de acogida.
Las inundaciones siguen afectando, principalmente, la periferia de la ciudad involucrando a 800 mil personas.
Un centenar de ejemplares escaparon en las últimas semanas de varios criaderos comerciales de los alrededores de Bangkok.
Hasta el momento se han drenado 9.900 millones de metros cúbicos de agua, y se planean drenar 5.500 millones más. Ya van más de dos millones de daminificados.
Esta medida radical, que se pretende implementar al este de la capital, es para hacer frente a las inundaciones.
La más reciente alerta de evacuación fue emitida hoy para el distrito Sai Mai, situada en el área periférica al norte de la capital tailandesa, donde el agua alcanza hasta medio metro de altura.
Ya hay varias zonas de la capital anegadas, debido a que los diques de contención están cediendo a la masa de agua producto de las torrenciales lluvias que golpean al país desde julio.
Además, las autoridades llamaron a unas 30 mil personas a abandonar sus casas en las zonas aledañas, en el norte de Bangkok.
Abbisit Vejjajiva continuará al mando del Partido Democrático, luego de que el 96% de sus votos lo ratificaran como líder.
Los campesinos fueron asesinados mientras trabajaban en una granja en la provincia de Yala, en una zona marcada por este tipo de situaciones de violencia.
La medida fue anunciada por el ministro de Cultura local, aunque no se especifica si afectará sólo a los extranjeros o también a los tailandeses.
El artefacto de fabricación casera fue detonado por control remoto cuando dos policías instaban por megáfono a los vecinos a acercarse a recoger alimentos en forma gratuita.
Los ejércitos de ambos países volvieron a enfrentarse, agudizando el conflicto que estalló hace una semana por demandas limítrofes.
El Organismo Internacional de la Energía Atómica expresó dudas respecto a que ese país pudiera garantizar la seguridad de una central de este tipo.