En septiembre se cumplen 80 años de la llegada del Winnipeg. Allí, junto a 2.200 españoles que huían de la Guerra Civil, llegó Roser Bru. Hoy, la conocida pintora apenas lo recuerda. Con 96 años y las secuelas de un infarto cerebrovascular, su memoria se ha ido esfumando. Su nieta menor, Amalá Saint-Pierre, tomó el desafío de reconstruir esos recuerdos y salvarlos del olvido. Ese trabajo, que tomó una década, se transformó en una obra de teatro que se estrenará el próximo mes en el GAM.
Gabriela García
16 ago 2019 06:07 PM