Los vitivinicultores italianos han confiado cada vez más en los trabajadores migrantes para la cosecha de otoño, pero las restricciones de los viajes y los crecientes costos de remuneración están empujando a muchos a recurrir a las máquinas.
Ian Lovett de The Wall Street Journal y Fotografías de Francesco Lastrucci para The Wall Street Journal
4 oct 2021 12:09 PM