Un excursionista alertó a las autoridades en la isla Steward (Rakiura), en el extremo sur del país oceánico, sobre la situación de las ballenas; quedaron varadas específicamente en la bahía Mason, donde la mitad estaban muertas cuando llegaron los socorristas, mientras que el resto fueron sacrificadas debido a la "dificultad para acceder al lugar", explicó el gerente de operaciones en Rakiura del Ministerio de Conservación de Nueva Zelanda, Ren Leppens. Fuente: Reuters
La Tercera TV
26 nov 2018 09:37 AM