Según la versión del dominical "Bild am Sonntag", Christian Wulff, interrumpió su enclaustramiento sólo para asistir a su despedida oficial con honores militares, hace unos días, tras haber dimitido en febrero por culpa de un escándalo de corrupción.
El ex mandatario es sospechoso de corrupción y tráfico de influencias por sus relaciones personales con varios empresarios.
De acuerdo con el sondeo de la cadena pública ARD, el 54% de los germanos aseguró que el mandatario debiera renunciar por las acusaciones de corrupción que pesan sobre él.
La indagatoria es por la adquisición del vehículo particular que habitualmente conduce Bettina, la esposa de Christian Wulff. Este es el segundo escándalo que envuelve al mandatario germano desde fines del año psado.
Christian Wulff se pronunció en la ceremonia de 70 años de Wannsee y garantizó a los judíos todo el respaldo alemán en caso de estar en peligro o ser perseguidos.
Christian Wulff es cuestionado desde hace semanas por pedir un préstamo millonario a una pareja de amigos empresarios y por frenar informes de prensa al respecto.
En dicho mensaje Christian Wulff, amenazaba con una demanda judicial a Bild, si se publicaba una nota en su contra, sobre el polémico crédito que le concedió un empresario.
Christian Wulff se disculpó en una entrevista televisiva, por presionar a un diario para que no se publicara una nota sobre el crédito que aceptó de una familia de empresarios.
Obras del lugar, de un reconocido atractivo turístico de Viña del Mar, tuvo un costo de $13 millones.
Obras del lugar, de un reconocido atractivo turístico de Viña del Mar, tuvo un costo de $13 millones.
