Danielle Zaror
29 ene 2025 10:00 AM
Tras la victoria del republicano en las elecciones de Estados Unidos, el fundador de Meta ha tomado una serie de decisiones significativas dentro de la firma.
El anuncio se conoce poco después de que la compañía nombró al político republicano Joel Kaplan como jefe de asuntos globales y eligió a Dana White, CEO de Ultimate Fighting Championship y amiga cercana del presidente electo Donald Trump, para su directorio.
El CEO de Meta subió un video a sus redes donde realizaba una parodia de los Juegos Olímpicos. Sin embargo, un día antes, había presentado los resultados del segundo trimestre de la compañía, tratando de convencer a los inversionistas que el enorme gasto en inteligencia artificial sería rentable. Claramente, el Zuck de las redes sociales no es el hombre que Meta necesita en estos momentos.
Ubicado en una isla de Hawái, el CEO de Meta levantó unos muros alrededor de un gigantesco terreno y prohibió a sus empleados que hablaran sobre el proyecto.
Lo que parecía la escenificación de la rivalidad empresarial entre Elon Musk y Mark Zuckerberg -el reto a un match de lucha libre- pronto se transformó en un desafío y casi una provocación, con el lanzamiento de Threads. Fue el momento en que los datos de cientos de millones de personas saltaron al ring.
En 2019, cuando Facebook, propiedad de Meta, reveló por primera vez la idea de sus monedas digitales estables —stablecoins—destinadas a revolucionar los servicios financieros globales, lo hicieron en colaboración con docenas de otras empresas.
El fundador de Facebook está desarrollando un proyecto visionario cuyo objetivo es superar el internet de las pantallas. El Metaverso de Zuckerberg, no solo busca construir un espacio de encuentro social, sino que también una tecnología capaz de soportar un universo tangible donde podamos trabajar, hacer deporte, estudiar y pasar en definitiva una buena parte de nuestras vidas en este espacio de realidad virtual.
La exempleada de la red social recopiló documentos que luego filtró y en los que se demuestra que la empresa, en la que trabajó hasta mayo pasado, puso repetidamente “el crecimiento por sobre la seguridad” de sus usuarios.
La exempleada Frances Haugen, quien fue fuente de documentos internos, testifica ante el panel de protección al consumidor del Senado.
Los memorandos internos muestran cómo un gran cambio de 2018 recompensó la indignación y que el CEO Mark Zuckerberg se resistió a las correcciones propuestas.
Una ruptura desharía la mayor parte de la cobertura de Zuckerberg para el futuro de Facebook, justo cuando sus inmensas inversiones en Instagram y WhatsApp están comenzando a dar fruto.
Se vuelve cada vez más popular el llamado por separar a las grandes empresas tecnológicas en empresas con menos poder. Para el fundador de Facebook, esto es un problema.
Será el único testigo en la audiencia, anunciada como un análisis del amplio impacto de la maypor red social en los sectores de servicios financieros e inmobiliario.