A medida que las ciudades comenzaron a crecer, los clásicos edificios de madera comenzaron a desaparecer de nuestras panorámicas. Materiales como el concreto y el vidrio fueron desplazando al que por varios siglos fue el material predilecto para cobijar nuestras estructuras. La madera sigue teniendo un aspecto acogedor en su exterior y una calidez a la que el gris difícilmente puede llegar. Es por eso que, a pesar de que las ciudades parecen haber apostado por el gris del concreto, hoy la madera también se ha convertido en parte fundamental para crear grandes edificios que destacan por combinar un gran tamaño junto con una estética acogedora.
El más alto de todos
En marzo de este año se completó la construcción de un nuevo hito en las construcciones de madera. Se trata de Mjøstårnet, un moderno edificio ubicado en la ciudad de Brumundal en Noruega y que, con sus 18 pisos de altura, se convirtió en el edificio de madera más alto del mundo. Mide 85.4 metros y contiene espacio para alojar un hotel, restaurantes, oficinas, departamentos para habitar e, incluso, una piscina que también está construida con madera. Para levantarlo, se utilizaron columnas de madera laminada que están presentes desde los cimientos hasta las paredes. En la única parte de la estructura donde debió utilizarse concreto fue en los últimos 7 pisos, para hacer un peso que contrarreste los fuertes vientos de esa zona de Noruega.
The Treet, el otro gigante noruego
Antes del Mjøstårnet, otro edificio cuidaba desde las alturas el record del edificio de madera más alto de su país. Se trata de The Treet (que significa El Árbol), una torre residencial de 49 metros de alto y que hasta el 2015, fue el edificio de madera más alto del mundo. Para diseñarlo, se optó por un sistema modular, en donde estructuras de cuatro pisos de altura se fueron apilando una sobre otra, reforzándose por una base de concreto y grandes columnas de madera laminada, llamada Glulam. Para protegerlo del clima, se tuvo que usar un revestimiento de vidrio y metal, pero se estima que para su fabricación se ahorraron 18 mil toneladas de CO2 solo por el uso de la madera como principal material de construcción.
Construido en tiempo récord
Considerada hasta febrero de este año como la mayor edificación de madera del mundo, el Brocks Commons Tallwood House, ubicado en Canadá, sorprende tanto por su altura de 53 metros de alto, como por la rapidez con la que se construyó. Este edificio residencial de 53 metros de altura alberga a más de 400 estudiantes de la universidad de British Columbia, en Vancouver. La torre, que se necesitaba para mejorar las condiciones de vida de los alumnos de la institución académica, logró construirse en tan solo 70 días, ya que los materiales de madera estaban prefabricados y listos para ensamblarse. A pesar de que la mayoría de su estructura está hecha de madera, gran parte de las paredes están cubiertas de yeso y otros materiales aislantes para cumplir las regulaciones anti incendio canadienses.
Madera que perdura
Con 33 metros de altura y más de 1400 años de antigüedad, el templo budista de Horyu-ji en Japón se mantiene como el edificio de madera más antiguo del mundo, siendo además uno de los más grandes. Esta pagoda está construida en cinco pisos diferentes, cada uno representando uno de los elementos de la naturaleza. Se dice que debajo de este templo hay una gran colección de tesoros, e incluso una tumba oculta, algo que por el peso del templo será imposible de recuperar. El templo sería aun más antiguo si es que no se hubiese quemado en un incendio, tras lo cual tuvo que ser reconstruido hace más de 10 siglos.
El ejemplo de Chile
Inaugurada en marzo de este año, la nueva oficina central de la CMPC ubicada en la ciudad de Los Angeles, es también la demostración de que la madera también puede albergar edificios con especificaciones tan complejas como las del mundo corporativo. Posee una superficie construida de 10.746 metros cuadrados, con capacidad para albergar a 470 trabajadores en dos de sus tres niveles, convirtiéndolo en el edificio de madera más grande de Latinoamérica. Posee además 35 salas de reuniones, diez salas de videoconferencias, un auditorio para 100 personas y un laboratorio dedicado a estudiar el crecimiento de los árboles. Además de su atractivo natural, la central de la CMPC es además un edificio energéticamente sustentable, certificado por LEED y fue diseñado para aprovechar la luz natural durante la mayor parte del día.