¿Cómo identificar la ansiedad y diferenciarla del estrés?

¿Te sientes ansioso pero no sabes cómo distinguirlo del estrés común? Aquí te traemos el ABC de la ansiedad, con insights de psicólogos expertos para ayudarte a entender esta compleja emoción y tomar el control.

“La ansiedad es una emoción que todas las personas sentimos, es natural y su función es adaptativa”, dice Constanza Trejo, coordinadora del programa de ansiedad y estrés de la Dirección de Salud y Bienestar Estudiantil UC. Pero la psicóloga sabe que esta emoción va mucho más allá.

Según la psicóloga Constanza Trejo, la ansiedad es una emoción que “nos permite dar respuesta a situaciones que podrían ser estresantes o de riesgo”. Sin embargo, explica que estas situaciones pueden ser reales y concretas, o pueden ser una amenaza de la cual desconocemos su origen. Dependiendo de la intensidad de la respuesta, se pueden identificar dos tipos de ansiedades:

• Ansiedad adaptativa: nos permite evaluar mejor los riesgos, motivarnos, tomar y evaluar mejor las respuestas. Es importante saber que la ansiedad no es siempre una emoción negativa, ya que es la que permite movilizarse y actuar para poder enfrentar esa situación.
• Ansiedad desadaptativa: cuando la respuesta es demasiado intensa, produce malestar y se cronifica en el tiempo. Esta es la que produce los síntomas negativos que se le atribuyen a la ansiedad. Pero es bueno entender que no es culpa de esta emoción, sino de la intensidad con la que se presenta.

Isabel Tupper, Jefa de Bienestar y Apoyo Estudiantil VIVE UDD, explica que la ansiedad tiene tres características principales:

1. Preocupación por el futuro: Se imagina una situación amenazante pero que está puesta en el futuro. Eso es más ansiógeno, porque como está en el futuro y no somos adivinos, no tenemos cómo saber si eso va a pasar o no. Entonces nos genera también una sensación de incertidumbre.
2. La ansiedad va “tiñendo” distintas áreas de funcionamiento de la persona: hay un componente afectivo donde las personas que sienten ansiedad presentan emociones como miedo, temor e irritabilidad. También afecta nuestra área cognitiva, los pensamientos que están presentes son negativos o fatalistas.
3. Nuestro cuerpo reacciona fisiológicamente ante la ansiedad: Por ejemplo, hay personas que dicen sentir que tienen mayor sudoración, palpitaciones o que se les aprieta la guata. Y también hay manifestaciones conductuales características. Es usual encontrar que personas que están viviendo momentos de ansiedad importantes sean más evitativas, tienden a esquivar las situaciones que temen enfrentar.

“Las manifestaciones suelen ser similares, pero la diferencia principal es que el estrés es una respuesta natural de activación ante estímulos del mundo externo y la ansiedad puede no estar asociada a un estresor reconocible”, explica Constanza Trejo. Por su parte, Isabel Tupper destaca que otra diferencia principal entre ambos es que el estrés no es necesariamente una emoción, “más bien lo que hace el estrés es generar, es un generador de emociones. Dentro de ellas puede ser la ansiedad, puede ser la angustia, puede ser el miedo y todas las emociones en el fondo que son muchísimas”, explica Isabel.