$222 millones: La demanda de la familia de Axel Kaiser por la golpiza que sufrió su hermano

Una demanda de indemnización de perjuicios presentó la familia del abogado, columnista y director ejecutivo de la Fundación para el Progreso, Axel Kaiser Barents-Von Hohenhagen (37). Ello, luego que a fines de marzo de 2017, su hermano Leif (36) sufriera una brutal golpiza a la salida del bar discoteca Las Urracas en la comuna de Vitacura.

En la acción, dirigida en contra de Rodrigo Tirapeguy Ramos (23) y Maximiliano Ortiz Heerwagen (25), no sólo figuran como demandantes Leif y Axel, sino que también sus otros hermanos: Max (34), Vanessa (40), Etzel (30) y también el padre de la familia Kaiser Barents-Von Hohenhagen, Juan Kaiser Wagner (71), quienes denunciaron el "daño moral" que sufrieran a raíz del ataque.

La demanda presentada ante el 8º Juzgado Civil de Santiago solicita condenar a los agresores a indemnizar solidariamente los perjuicios patrimoniales y morales, avaluados en $221.617.950. El monto es desglosado por medio de $130.000.000 en favor de Leif Kaiser, que incluye el daño moral, como víctima directa. Mientras que el resto de los hermanos y el padre de la familia, solicita una indemnización cada uno de $20.000.000, calificándose como víctimas indirectas del ataque.

Esta demanda civil surge luego que a fines de septiembre, el 4º Juzgado de Garantía de Santiago pusiera fin al juicio en contra de los agresores. En la audiencia de suspensión condicional del procedimiento, los autores del ataque Rodrigo Tirapeguy Ramos y Maximiliano Ortiz Heerwagen quedaron sujetos firma mensual por dos años, terapia sicológica bimensual durante el mismo lapso y al pago de 2,5 millones de pesos de manera individual y a modo de indemnización.

El 29 de marzo del año pasado, tras concurrir a bailar con unos amigos a Las Urracas, casi a las cuatro de la mañana Leif Kaiser fue interceptado por los demanda dados Tirapeguy y Ortiz, quienes sin mediar razón y motivo, comenzaron a intimidarlo y acercarse a él, debiendo retroceder a fin de mantener cierta distancia respecto a los demandados.

"Leif Kaiser intentó –sin éxito- defenderse, pues fue rápidamente reducido por ambos agresores, quienes lo derribaron violentamente al suelo, siendo agredido corporalmente –con ensañamiento- por ambos demandados, quienes le propinaron innumerables golpes de puños y patadas en su cabeza, rostro, nariz y todo su cuerpo, atentando gravemente contra su integridad física", consignó la demanda.

Según el reporte de la Clínica Las Condes "Leif Kaiser sufrió un TEC cerebral, heridas contusas palpables inferiores en sien derecha, desviación deptal expuesta traumática, fracturas faciales múltiples y en el complejo nasal, traumatismo en la zona de costillas y múltiples hematomas en la zona del rostro y abdomen".

A raíz del hecho sucedido, Leif Kaiser debió ser sometido a una serie de intervenciones médicas y quirúrgicas para reconstruir su rostro por la rotura de sus tabiques nasales. Su piel debió ser injertada. Sufrió y sigue padeciendo mareos intensos que le imposibilitan realizar actividades normales.

"Ha tenido insomnio y mantiene frecuentemente pesadillas en que sueño que es perseguido por un grupo de personas que buscan atentar contra su vida, las cuales se dan hasta el día de hoy. Ha padecido un estado depresivo y de estrés post traumático a raíz de sentirse absolutamente vulnerado, siente miedo, temor y angustia de ser atacado nuevamente", señala la demanda.

Por otro lado, la acción también detalló los daños morales que sufrió la familia a raíz del ataque.

El daño moral sufrido por Axel Kaiser, a raíz de la brutal agresión a su hermano, "le ha causado enorme menoscabo sicológico, incluyendo estrés crónico, insomnio e incapacidad de continuar con actividades laborales normales debido al menor rendimiento físico e intelectual".

"En su caso en particular, el criminal ataque no sólo expuso directamente a Axel Kaiser y a toda su familia al escrutinio público, debido a la cobertura realizada por los medios de prensa escritos y televisión, sino que además lo obligó decenas de veces a aclarar si el ataque había sido o no políticamente motivado debido a su perfil público y tendencias política, agregando una presión adicional a la tragedia, lo que forzó a Axel Kaiser a tomar resguardos especiales para no verse expuesto a agresiones físicas, sintiendo permanente miedo, aflicción y angustia, ya que temía que lo golpearan en la calle, como le ocurrió a su hermano", consignó la acción.

En el caso de Juan Kaiser, la acción sostiene que el padre de Leif se encontraba la noche de la golpiza en Villarrica, Región de La Araucanía. Al amanecer se percató que en su celular existían numerosos mensajes extraordinariamente alarmantes debido a la situación de salud de su hijo, que permanecía internado grave en la Clínica de Las Condes.

"Al enterarse de lo sucedido, don Juan Kaiser sintió un alto nivel de aflicción y angustia, que lo llevó a intentar viajar de urgencia vía aérea a Santiago; lo cual fue imposible ese día. Durante el trascurso de la jornada comenzaron a llegarle escalofriantes fotografías de su hijo, las cuales lo remecieron profundamente haciéndolo pensar que su hijo podría haber muerto esa noche; sufriendo inconmensurablemente al ver lo impactante de las imágenes", concluyó la demanda.