Mi Acróstico: Jacqueline Van Rysselberghe

Jaime Guzmán fue mi fuente de inspiración para ingresar al servicio público, la UDI y la política, al igual como lo fueron mi abuelo y mi padre. Ellos incidieron en lo que ha sido mi vocación.

Amo a mi familia por sobre todas las cosas. Mis seis hijos y mi marido son mi refugio y mi zona de confort. Parte importante de la inspiración que me mueve reside en ellos, y su respaldo a lo que hago ha sido esencial en una actividad que tiene muchos costos y sacrificios.

Competir en atletismo federado desde niña moldeó en gran medida mi carácter, ya que el deporte de alto rendimiento implica mucho esfuerzo, tenacidad y constancia para alcanzar el éxito. Y ser campeona nacional de 400 metros me mostró que si uno se propone metas y lucha por alcanzarlas, se pueden cumplir. Por eso creo firmemente en el mérito para lograr objetivos importantes en la vida.

Quiero un país desarrollado, en que el fruto de ese progreso llegue a cada chileno, mejorando su calidad de vida y bienestar. Esto lo podemos lograr si somos capaces de enfrentar los grandes desafíos que tenemos, sobre la base de acuerdos y consensos. Porque cuando la política busca genuinamente el bien común, se engrandece.

Unidad es el eje que voy a promover con fuerza durante mi segundo período al mando de la UDI, ya que sin unidad no es sostenible nuestro proyecto político en el tiempo. Soy una dirigente de convicciones y pragmática, y me la voy a jugar por completo para que la UDI continúe siendo la principal fuerza política del país.

Estoy convencida de que a Chile le haría muy bien tener un Presidente de la República de la UDI, que imprima un marcado sello social a las prioridades del Chile actual, representando fielmente los intereses de la inmensa clase media y los sectores populares. Vamos a desplegarnos para alcanzar este anhelo.

La lectura y la cocina son dos de las actividades que me encantan y me relajan. Cada vez que tengo algo de tiempo libre, trato de aprovechar para disfrutar un buen libro o preparar algún plato rico. Aunque los asados se los dejo a mi marido.

Intento poner en práctica la corriente psicológica gestáltica, que invita a vivir el presente sobre la base de experimentar las sensaciones. No soy de quedarme pegada con cuestiones del pasado o irme a las nubes soñando en el mañana. Claro que tengo proyecciones y visión de largo plazo, pero la base está en el presente.

No puedo más de chochera el ultimo tiempo. Un de mis hijos se casa en los próximos meses, otra de mis hijas se recibió de Medico y otra postuló para ingresar a la PDI y quedó. No hay mayor felicidad para una madre que ver a sus hijos plenos y realizados.

Espero que pronto Venezuela recupere la democracia, y el pueblo venezolano pueda sacudirse pacíficamente de la actual dictadura y soñar un futuro mejor. Ningún país merece pasar por la miseria a la que está sometiendo Maduro a sus compatriotas.