El policial de luto: muere Andrea Camilleri
Luego de un mes de agonía falleció el escritor italiano en Roma, a los 93 años. Convertido en bestseller con su famosa saga protagonizada por el comisario Salvo Montalbano, hace dos años un glaucoma lo condenó a la ceguera.
Esta mañana con una ovación en la Cámara de Diputados del Parlamento italiano fue homenajeado el escritor Andrea Camilleri. La imagen, de los políticos de pie aplaudiendo, la difundió en su cuenta de Twitter la demócrata Patrizia Prestipino. "Solo algunos miembros de la Liga permanecieron sentados y en silencio", señaló la ex concejala en referencia a los integrantes del partido de derecha italiano.
Hoy la red social se convirtió en un libro de despedida con mensajes de escritores y editores y los principales diarios del mundo repararon en su partida. "Día triste para los fanáticos del género policial. Nos ha dejado uno de los mejores escritores contemporáneos, don Andrea Camilleri", apuntó en su cuenta el autor chileno Carlos Basso. "Se murió el maestro Camilleri: los amigos de Montalbano ya lo extrañamos", señaló el narrador argentino Martín Caparrós.
El pasado 17 de junio Andrea Camilleri, quien se confesaba comunista y ateo, había ingresado de urgencia, tras un paro cardiorrespiratorio, al Hospital Santo Spirito de Roma, ciudad donde vivía. Desde entonces se mantenía con un respirador artificial. Hoy murió, a los 93 años, acompañado de su familia, quienes informaron que el funeral se realizará de forma privada.
Con más de 90 años Camilleri decía que él era el último sobreviviente de sus 15 amigos de infancia de su natal Sicilia. El futuro para el escritor no era muy promisorio, sin embargo era optimista. Hace dos años, debido a un glaucoma, el narrador había perdido la visión. Hace más de una década trabajaba con la ayuda de su asistente Valentina Alferj. Entonces la memoria fue su mayor aliada para la escritura de sus nuevas historias protagonizadas por el comisario Salvo Montalbano.
"La ceguera me ha hecho libre. Así no debo ver ya mi cara de imbécil. Ahora mis sueños están repletos de colores", dijo irónico el prolífico creador, quien en 1994, hace 25 años, hizo su debut con el policía que vive en la localidad ficticia de Vigàta, en la provincia de Montelusa. Montalbano comenzó investigando el sórdido asesinato del ingeniero Silvio Luparello en la novela La forma del agua.
Con más de 30 millones de ejemplares vendidos, el nombre del personaje Montalbano fue elegido como un homenaje al escritor español Manuel Vázquez Montalbán (1939-2003). La saga de Montalbano, conformada de 27 novelas, fue adaptada a la televisión hace dos décadas interpretado por el actor Luca Zingaretti. Hace algunas semanas había aparecido en Italia el volumen Il cuoco dell'Alcyon (El cocinero de Alcyon), parte de la saga del comisario amigo de la buena mesa.
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Il cuoco dell'Alcyon
(El cocinero de Alcyon) es la última entrega de la saga.[/caption]
"La oscuridad no se puede combatir. No hay nada que hacer. Hay que agarrarse a la memoria, repasar. Pido que me lean algunas páginas de nuevas novelas, periódicos", dijo Camilleri, en 2017, al diario español El País. Por esos días estaba molesto por que la empresa Philip Morris había dejado de fabricar los cigarrillos que fumaba. De Philip Morris se había cambiado a la marca Muratti y consumía en promedio 60 cigarrillos diarios.
Autor de más de 100 libros, en 2014 señaló al suplemento El Cultural: "En mis novelas describo ambientes sórdidos, es cierto, pero lo hago desde la ironía y el humor porque, como decía Leonardo Sciascia, esa es la perspectiva indispensable para afrontar circunstancias difíciles".
Crimen organizado
Andrea Camilleri nació en Porto Empedocle, Sicilia, el 6 septiembre de 1925. Director teatral, guionista de televisión, miembro del Partido Comunista, se inició en el mundo artístico con montajes de obras de Pirandello, Ionesco, T. S. Eliot y Samuel Beckett.
En 1958 empezó a enseñar en el Centro Experimental de Cinematografía de Roma. Antes había intentado ingresar a la RAI, pero no fue seleccionado por ser comunista. Sí logró entrar, años más tarde, a la compañía de radiodifusión pública italiana.
En 1978 Camilleri debutó en la ficción con El curso de las cosas. Ambientada en Sicilia, en los años 60, la novela es un policial que muestra indicios del comisario Montalbano. Un policía formado con el carácter del padre del escritor. "Era inspector de puertos en el sur de Sicilia, inspector de trabajo portuario", contó el año pasado Camilleri.
En su siguiente libro, Un hilo de humo (1980), aparece la ciudad ficticia de Vigàta, el centro de operaciones de su personaje más famoso, con el que obtuvo galardones como el Premio RBA de Novela Policiaca (2008) y el Premio Pepe Carvalho (2014).
El éxito literario se produjo en la década del 90 cuando Camilleri inició su saga con La forma del agua (1994). Desde ahí no se ha detenido hasta El carrusel de las confusiones, su última entrega en español. Publicada por editorial Salamandra, en 2016, el secuestro de una serie de jóvenes mujeres llama la atención de Montalbano, quien sospecha de la mafia.
Sobre la mafia en su natal Sicilia, hace dos años señaló: "Mientras haya pobreza y la posibilidad de que un individuo te de trabajo en sitios de tanta desocupación, habrá organizaciones mafiosas. El problema es que el estado italiano nunca ha querido ir a fondo con el crimen organizado".
El narrador tenía todo definido para su memorable personaje. Pasado los 80 años escribió la historia final con la muerte de Salvo Montalbano. El título es Riccardino y se lo hizo llegar a su editora. "Cuando lo acabé se lo mandé a Elvira Sellerio con la indicación de que lo metiera en un cajón y que no lo publicara hasta que yo decidiera hacerlo o hasta mi muerte", señaló el año pasado Camilleri.
Sobre el origen del famoso comisario agregó: "Al crear el personaje me propuse que no fuera un policía americano, porque no hubiera funcionado; que no fuera un policía privado, porque hubiera estado limitado en sus funciones; escogí un comisario institucional, es decir, de la seguridad pública. El modelo inmediato es el inspector Maigret, de Georges Simenon".
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Tres novelas de la saga Montalbano.[/caption]
Opinión
Un atento observador
Por Ramón Díaz Eterovic
Leí a Andrea Camilleri desde que comenzaron a conocerse sus primeras novelas y su obra destacó en el ámbito de la narrativa policial italiana y europea. Después de eso sus lectores se multiplicaron por todo el mundo. Su legado principal es su detective Salvo Montalbano, un policía que hace su trabajo con particular eficiencia y que al mismo tiempo es un gozador de las cosas amables de la vida, como el vino y la comida. También habría que destacar en Camilleri su lucidez para mostrar y reflexionar acerca de la realidad social y política de Italia y de Sicilia en particular. En sus novelas están presentes muchos de las situaciones que conmueven a las sociedades actuales, como la corrupción política, las emigraciones, el narcotráfico. Camilleri fue un atento observador de nuestra época y eso le dio un sentido más profundo a sus intrigas policíacas. Montalbano quedará en la galería de los grandes detectives, junto a su admirado (en realidad admirado por Camilleri) Pepe Carvalho.
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