Hace poco más de un año, la diputada María José Hoffmann (UDI) presentó una querella ante el 4º Juzgado de Garantía de Santiago. En esta denunció que cada vez que participa en espacios informativos de los medios de comunicación, ha observado un “evidente y constante fenómeno de hostigamiento y descrédito, aparentemente organizado, dirigido contra mi persona”.

La acción que sigue vigente en tribunales detalla el ciberacoso que sufre en redes sociales, destacando los cuestionamientos en Twitter por su nivel de virulencia. Las agresiones -consignó en el escrito- tomaron relevancia en junio del año pasado, cuando se relacionó a su hijo con Martín Pradenas, imputado como autor de los delitos reiterados de abuso sexual y violación.

El 20 de julio de 2021, la Brigada del Cibercrimen de la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) emitió un informe, solicitando al 4º Juzgado de Garantía de Santiago oficiar a través del procedimiento previsto en el Tratado de Asistencia Judicial Mutua (MLAT) a la empresa Twitter en Estados Unidos a fin de obtener la información de los perfiles indagados.

Se trata de más de 32 cuentas que en cada aparición pública de la parlamentaria la critican duramente y, según la querella, incurren en actos de injurias graves. Para la diputada son “acusaciones injuriosas e infundadas, de naturaleza evidentemente falsa, que considero en cualquier caso inaceptables, pero de inequívoca naturaleza injuriosa al estar dirigidas a una persona que ejerce un cargo público”.

Entre las personas que estarían detrás del acoso y han sido identificadas por los asesores legales de la parlamentaria figura Marcelo Inostroza (@inostroza_), quien se desempeñaría como funcionario en Xerox Chile, según una revisión a su Linkedin, consignó el escrito. La PDI, para comprobar esta información, ofició a la empresa, desde donde contestaron que debía presentarse un requerimiento formal al tribunal.

La magistrada Andrea Díaz-Muñoz, del 4° Juzgado de Garantía de Santiago, acogió el requerimiento y el pasado 10 de agosto ordenó oficiar a la empresa Xerox Chile, solicitando el nombre completo y cédula de identidad del usuario titular de la cuenta de correo electrónico.

En cambio, la jueza desestimó la solicitud de los abogados de la parlamentaria en cuanto a solicitar a la compañía de telecomunicaciones Claro Chile el nombre del titular de un número celular que está indexado a la cuenta @aleinos.

“Con la información proporcionada por la Policía de Investigaciones es suficiente para tener por cumplido su objetivo , sin que la información de los datos del titular de dicho número pueda implicar vincular a dicho titular en la cuenta de Twitter mencionado por la PDI”, añadió la resolución.

Entre las cuentas denunciadas e investigadas están: @natariz1; @jucarlapa; @SublimeXu; @MiPropioMantra; @Caffe_80s; @ytanseyer; @travellerCL; @TetonaNoticiera y @humbergg2. Este último es un activo promotor del cuarto retiro de fondos de pensiones y de instar a un nuevo estallido social el próximo 18 de octubre.

Además, en el informe de la PDI se detallan las declaraciones de cuatro testigos. Entre ellos está la del marido de la parlamentaria, Gonzalo Müller, exasesor de Joaquín Lavín y director del Centro de Políticas Públicas de la Universidad del Desarrollo.

Según el mismo documento, el abogado sostuvo: “María José es diputada desde el año 2010. Durante el año 2020 se vio expuesta a una verdadera campaña política en su contra que se manifestó en redes sociales, donde se generó un inmenso desprestigio hacia su persona, esto a través de múltiples acusaciones falsas que se realizaban hacia su persona y en contra de algunos miembros de mi familia”.

“Estos ataques en redes sociales coinciden con la aparición de María José en distintos programas de televisión, por lo que se gatillan a raíz de estos. Muchas veces, los ataques no tenían siquiera relación alguna con lo que ella decía o debatía, sino que simplemente se buscaba ofenderla e injuriarla a ella y a miembros de nuestra familia”, añadió.

“Resulta a lo menos curioso e importante señalar que todo esto ocurre en el contexto de la discusión y votación del primer retiro del 10%, en donde, María José era jefa de bancada de la UDI, y, en una primera instancia, el oficialismo mantenía un frente unido, sin embargo, posteriormente a los ataques de similar naturaleza sufridos no solo por María José, sino que por otros miembros de partidos oficialistas, los votos de derecha se fueron dividiendo”.

”Queda de manifiesto a través de este modo de operar, y del contenido de los mensajes, la intencionalidad política de hacerle daño a la imagen pública de María José Hoffmann como diputada y como representante de su partido político, la UDI, ya que casi la totalidad de los mensajes proviene y se identifica con la extrema izquierda más radicalizada, tanto por el lenguaje utilizado, el tipo de imágenes, pero principalmente por cómo se autoidentifican sus emisores, quienes en sus biografías se hace evidente que pertenecen a sectores organizados de extrema izquierda”, concluyó.

Asimismo, el hermano de la diputada, Fernando Hoffmann Opazo, sostuvo que “me consta que las afirmaciones injuriosas y calumniosas que se leían en redes sociales son totalmente falsas y de personas que no la conocen. Creo que el único objetivo de esto era amedrentarla, menoscabar su imagen y honor público, el de ella y su familia. Como su hermano fui testigo de lo doloroso que fue para ella el ver cómo se atacaba a su familia, especialmente a su hijo, con acusaciones falsas y sin ningún fundamento”.