Bolivia: bloqueo total y divisiones en el partido de Evo Morales

foto: afp

Miles de alteños vestidos de negro marchan hacia La Paz con los féretros de las víctimas que dejó el operativo militar del martes en Senkata. Ante el llamado de los vecinos a radicalizar las protestas, el país amaneció con 16 carreteras cortadas en La Paz, Oruro, Cochabamba y Santa Cruz, lo que amenaza con profundizar el desabastecimiento y un alza de precios.


Al menos 16 carreteras nacionales y departamentales en La Paz, Oruro, Cochabamba y Santa Cruz amanecieron hoy totalmente bloqueadas por manifestantes que exigen la renuncia de la Presidenta interina, Jeanine Áñez. Según la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), en diferentes tramos viales se registraban más de 90 puntos de conflicto que incluyen barricadas y movilizaciones. Los vecinos de El Alto endurecieron el cerco después del operativo militar en las afueras de la planta Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en Senkata que dejó 8 fallecidos. Por esto hoy los alteños marchaban hacia La Paz vestidos de negro y con los féretros de las víctimas fatales. "¡El Alto de pie, nunca de rodilla!", se escuchaba entre los participantes de la jornada.

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Las protestas que iniciaron los bolivianos en rechazo a las cuestionadas elecciones del 20 de octubre en que Evo Morales fue "reelecto" por cuarta vez consecutiva, derivaron días después en la renuncia y el exilio en México de Evo, y también en violentas manifestaciones de sus adherentes. El alzamiento contra el gobierno interino ha generado desabastecimiento y un alza de precios en los insumos como el combustible y carne.

Ante el complejo escenario social y político que ha provocado violentos enfrentamientos, largas filas para comprar, varios negocios cerrados y la amenaza de mayor radicalización, se establecieron puentes aéreos de pasajeros y alimentos en el aeropuerto internacional de El Alto.

"Convocamos a toda la ciudad de El Alto a movilizarse en un bloqueo de todas las calles, para que la hoyada paceña  sienta lo mismo que  nosotros sentimos con la muerte de nuestros compañeros", señaló uno de los dirigentes de Senkata en un cabildo ciudadano en que ratificaron que hoy los bolivianos de los 14 distritos de la ciudad y las delegaciones sociales que han llegado a la capital para marchar desde la parroquia donde velan a las víctimas fatales.

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Sin embargo, no sólo La Paz ha vivido los bloqueos, sino el descontento social se ha extendido en buena parte del país. Según el diario Página Siete, el comandante departamental cruceño, Miguel Mercado, señaló que en Santa Cruz las rutas cortadas son las carreteras hacia Cochabamba y Beni. Al mismo tiempo, los gremios campesinos de Potosí acordaron levantar las barricadas en las que participaban alrededor de mil personas en la carretera hacia Sucre hasta el domingo, cuando analizarán los próximos pasos.

La mayor expectación tenía lugar en las afueras de la planta YPFB en Senkata. El gobierno de Áñez alertó que existe un cerco "peligroso" de grupos afines al partido de Evo Morales, el Movimiento Al Socialismo (MAS), como la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve). Ante esto, el ministerio de Defensa informó que "las Fuerzas Armadas del Estado Plurinacional de Bolivia en cumplimiento de la Constitución Política del Estado (CPE), se encuentran resguardando dichas instalaciones y evitarán, de acuerdo a sus atribuciones que la ley ampara, cualquier tipo de ataque o toma de la Planta de Senkata".

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Las elecciones quiebran al MAS

A más de una semana desde que la exsenadora de Beni, Jeanine Áñez, juró en la Presidencia (transitoria) de Bolivia, la incertidumbre aumentaba con el correr de las horas ante la falta de consenso para convocar nuevas elecciones. El Senado, dominado por el MAS y el Ejecutivo interino enviaron el miércoles dos proyectos de ley distintos que tienen el mismo objetivo: anular los resultados cuestionados, reorganizar el Órgano Electoral Plurinacional (OELP) para nombrar los vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y acordar una fecha para los nuevos comicios.

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La disputa se genera porque el proyecto de los senadores valida a todos los binomios que participaron en las elecciones del 20 de octubre, entre ellos a Evo Morales y Álvaro García Linera. Además, apuntan a que los comicios se realicen el 12 de enero de 2020 con el mismo padrón del mes pasado. Sin embargo, el ministro de Justicia, Álvaro Coímbra, explicó que sería imposible realizar la votación en la fecha propuesta ya que el mandato interino de Áñez finaliza el 20 de enero 2020.

Tras los movimientos en el Senado, que tiene 2/3 de masistas, la tensión aumentó entre los diputados, ya que el vicepresidente de la Cámara, Henry Cabrera, señaló hoy en entrevista con Unitel que "el MAS tendrá otro candidato a Presidente y Vicepresidente. Vamos a participar en las elecciones, ellos (los opositores) nos propusieron que les ganemos nuevamente la elección, les vamos a ganar con el TSE que ellos vayan a elegir y nosotros vamos a elecciones con nuevos candidatos".

Cabrera, del MAS, también señaló que "ya el Presidente Evo Morales, el expresidente, presidente compañero Evo Morales, ha manifestado que no será ya candidato, por lo tanto nosotros pondremos otro candidato. La sentencia de 2017 del TCP obviamente tendrá que ser vicio de nulidad, lo que queremos es transparencia".

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A pesar de esto, en una conferencia de prensa en Ciudad de México Evo Morales se refirió a que no tiene procesos legales en su contra y que es el candidato que fue electo en primera vuelta. "Vamos a conformar una Comisión de la Verdad con personalidades internacionales para verificar si evidentemente hubo fraude. Hemos tenido acceso a dos informes técnicos de instituciones serias y renombradas que demuestran que hemos ganado en primera vuelta", señaló hoy el exdirigente cocalero en su cuenta oficial de Twitter.

Otro de los respaldos que recibió en las últimas horas Evo Morales llegó desde Argentina. El próximo 10 de diciembre, Alberto Fernández jurará como el nuevo mandatario de Argentina. Según Clarín, el dirigente peronista, que catalogó la salida de Evo como un "golpe de Estado", no contempló invitar a Jeanine Áñez a la ceremonia, sino que la cursó al Presidente renunciado.

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