A ocho días de completar un año en el poder, la “atmósfera” de cambio de gabinete no se disipa en el gobierno. El desfile de autoridades, de hecho, en Palacio no cesa: este jueves se vio cruzar los patios de La Moneda al subsecretario de Salud Pública, Cristóbal Cuadrado (RD) y a su par de Educación, Gabriel Bosque (PC).

Las versiones en torno a la continuidad de ambos son conocidas: en Salud, esta vez sí podría concretarse la salida de Cuadrado de la Subsecretaría de Salud Pública. En La Moneda, advierten, que son conocidos los roces “de estilo” con las otras autoridades del Minsal. Y a ello se suman cuestionamientos a la cobertura de la vacunación bivalente contra el Covid-19, proceso a cargo de dicha repartición. En su lugar podría asumir Bernardo Martorell (PPD) -actual coordinador de la reforma de salud-, quien estuvo a punto de hacerlo en el ajuste anterior. De todas formas, si bien su nombre ronda en el PPD, no es de pleno consenso entre los dirigentes.

Y en el caso de Bosque, entre quienes defienden la continuidad del ministro de Educación, Marco Antonio Ávila (RD), apuntan a que muchos de los problemas de la cartera radican en la subsecretaría y no en la gestión del secretario de Estado en sí.

De todas formas, si se habla de “balance político” en la segunda línea de autoridades -a favor del Socialismo Democrático, como ha solicitado esa coalición-, en algunos partidos y en el mismo gobierno ven una ventana en las subsecretarías dirigidas por independientes y podrían convertirse en los espacios donde los partidos ligados a la exConcertación acrecenten su influencia.

Ya es conocido que algunas de las carteras al mando de independientes como la Subsecretaría de Obras Públicas, algunas de las de Educación -Parvularia o Superior-, Pesca, Bienes Nacionales o Derechos Humanos son miradas con atención por el PS y el PPD, aunque entre los socialistas niegan haber solicitado alguna en particular. De todas formas, estos últimos, también miran con interés Desarrollo Social, aseguran fuentes partidarias.

Según consta, de las 39 subsecretarías, 11 corresponden a independientes. Algunos, eso sí, con cercanía política como el subsecretario José Miguel Ahumada (Relaciones Económicas), cercano a RD; Haydeé Oberreuter (DD.HH.) a Comunes o Fernando Araos (Redes Asistenciales) a Convergencia Social.

En Apruebo Dignidad, sobre todo, toman distancia de la idea de la compensación. En el PC, el secretario general Lautaro Carmona ha dicho que “hacer de las distintas tareas de Estado una distribución por sobre las capacidades de la gente y por sobre la misión que existe, haciendo por adelantado una distribución y creer que lo equitativo se resuelve por esa vía, no es la mirada nuestra”. Lo secundó también la diputada de su partido, Karol Cariola.

El senador y timonel RD, Juan Ignacio Latorre, ha planteado que “el Presidente verá si el tema de los equilibrios es un criterio que considera relevante a la hora de decidir los ajustes”.

Ad portas del ajuste ministerial, Revolución Democrática (RD) sostendrá mañana sábado y el domingo la culminación de su congreso estratégico, instancia definida por el partido para zanjar determinadas posturas coyunturales y también de más largo plazo.

De esta forma, la colectividad en un documento de 14 páginas -al que tuvo acceso La Tercera PM- sistematizó las mociones discutidas en los últimos meses de proceso congresal.

Y el primer punto tiene relación con la contingencia: el partido se ha propuesto -sujeto a la votación interna de este sábado- impulsar el reintegro de su colectividad al comité político. Una representación que se vio reducida a cero -en septiembre pasado- con la salida Giorgio Jackson de la Segpres, reubicado en el Ministerio de Desarrollo Social.

Asimismo, el partido también buscará propiciar la representación de mujeres de RD en el gabinete. Hasta ahora, y a diferencia del Socialismo Democrático, las colectividades de Apruebo Dignidad, en lo público, se habían mantenido al margen de las solicitudes a La Moneda.