Camilo Grez, el asesor de Interior que trabajó en los gobiernos de Bachelet y Piñera, y es clave en el manejo de los incendios forestales

Quienes han sido testigos de algunos de las sesiones del Comité para la Gestión de Riesgo de Desastre (Cogrid) de las últimas semanas, coinciden en que Camilo Grez siempre fue uno de los actores destacados de las instancias. “Su voz se escuchaba con mucha atención”, dicen.

El ingeniero comercial hoy es el jefe de Gestión de Riesgos y Emergencias del Ministerio del Interior -cargo al que llegó en marzo de 2022- y los incendios forestales que se dieron las últimas semanas hacia el sur del país lo pusieron de golpe y porrazo en el centro de atención de dicha cartera. Su ascendencia llegó a tal que no pocos en el entorno del gobierno aseveran que todas las decisiones relevantes se han ido tomando previa consulta al profesional que está próximo a cumplir 40 años.

Ha sido en esas reuniones donde se le ha visto permanentemente respondiendo consultas de diversas autoridades. “Es muy claro”, señalan conocedores de las mismas, quienes ejemplifican que, sobre todo estas últimas semanas, cuando han llegado solicitudes y reclamos de vecinos o alcaldes a causa de la emergencia, él es quien pone paños fríos y contextualiza la real magnitud de esas peticiones. Las mismas fuentes, de hecho, señalan que tiene “mucha capacidad” para transmitir cuáles son las dimensiones de un hecho y cómo proyectarlo.

Hoy, con los incendios pasando de controlados a reactivados y viceversa, es motivo de consulta permanente del gabinete de Interior, de la propia ministra Carolina Tohá y del subsecretario Manuel Monsalve. Tiene un perfil bajo, según las mismas personas consultadas. Dicen que se mantiene cómodo sin hacer ruido y que toda su carrera ha sido así. Que como mejor se siente es entregando información a las autoridades, quienes tienen muy bien evaluada su capacidad de coordinación, su buen trato y que sea muy ejecutivo.

Su carrera en organismos públicos, eso sí, comenzó mucho antes de la llegada de este gobierno. De hecho, quienes hablan de su labor, destacan justamente la capacidad de haber trabajado bajo el alero de distintos gobiernos –y organizaciones- con el mismo profesionalismo.

Y es que luego de haber estudiado ingeniería comercial en la Universidad Adolfo Ibáñez y obtener su grado de magíster en Economía y Políticas Públicas en 2009 en la misma institución, instancia donde llegó a ser ayudante de la cátedra Economía Chilena a cargo del exministro de Hacienda Ignacio Briones, Grez tuvo su primer gran desafío en 2010, cuando asumió como jefe zonal del Maule de Un Techo para Chile la planificación y coordinación de la construcción de viviendas de emergencia a causa del terremoto -27F- de ese año. En sus redes, de hecho, dice haber superado en 2.250 la meta de 6 mil mediaguas con un mes de anticipación y habiendo ahorrado un 20% de los recursos.

Tras ello y en medio de las permanentes conversaciones con sus cercanos sobre la poca participación de las nuevas generaciones en el Congreso y la necesidad de revertirlo, comenzó su rápido ascenso en cargos estatales: en diciembre de 2010 asumió como coordinador de Fortalecimiento del Centro de Alerta Temprana de la ex Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), dependiente de Interior. Luego, en la misma, pasó a ser el jefe de Unidad de Simulacros y Simulaciones para luego ejercer como jefe de División de Protección Civil y jefe de Departamento de Programas. Ahí llegaría su gran salto.

En enero de 2016 Ricardo Toro, entonces director nacional de la Onemi, confió en él para designarlo como su jefe de gabinete. En ese cargo fue el responsable de aconsejar a la máxima autoridad de la oficina, así como fue donde terminó de forjar un perfil de asesor debido a la experiencia que adquirió vinculándose con autoridades regionales, nacionales e internacionales, tanto del sector público como el privado.

Ahí trascendió gobiernos, tal como su jefe. Estuvo, de hecho, con Michelle Bachelet y Sebastián Piñera. Y ahora con Gabriel Boric, toda vez que su nombre fue uno de los que inmediatamente aparecieron en carpeta para escalar en el Ministerio del Interior en sus cargos técnicos. Así se transformó en jefe de Gestión de Riesgos y Emergencias y con ello, poco a poco, en una suerte de Pepe Grillo -así lo grafican algunos cercanos- de las máximas autoridades de la cartera cuando de desastres, emergencias y catástrofes se trata. Primero fue el Covid-19, y ahora, los incendios.

Pero, además, por la naturaleza de su cargo también ha sido él mismo el encargado de recibir en algunas ocasiones, incluso antes de la emergencia a causa del fuego, a diversas autoridades e instituciones, como Bomberos de Chile o delegados presidenciales.

Él se considera un profesional comprometido, con capacidad de liderazgo y de trabajo en equipo “con muy buen desarrollo de las habilidades blandas, manejo de situaciones complejas y facilitación de soluciones”, según se lee en su LinkedIn.

“Profesional con 12 años de experiencia en asuntos públicos y Gestión del Riesgo de Desastres. He construido y formado equipos, desarrollado políticas públicas de impacto nacional y trabajado en la respuesta a los principales desastres en el país desde el 2010, todo con un enfoque de trabajo interinstitucional y multidisciplinario con equipos técnicos y autoridades. Además, he participado y expuesto en diversas actividades y seminarios tanto a nivel nacional como internacional”, dice su currículum, el que se ha complementado con diplomados y cursos en Estados Unidos, México y Japón, experiencia que hoy se ha puesto a prueba con los incendios en el sur.