El frente de lluvias registrado la semana pasada en la zona centro-sur del país provocó estragos. A las 7:00 de este viernes, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres informó que el evento ha dejado 2 fallecidos, 2 desaparecidos, 21.673 damnificados, 1651 albergados; destruyó 1.623 viviendas y ocasionó daños mayores y menores en otras 7.128 casas.

El gobierno decretó zona de catástrofe en seis de las siete regiones afectadas por las precipitaciones, que también deterioraron 361 establecimientos educacionales, mantiene ocho centros de salud cerrados y provocó perjuicios a miles de hectáreas dedicadas a la agricultura, apicultura y ganadería.

Pero eso no es todo. El desborde de ríos, deslizamientos de material y socavones alteró la conectividad vial, dejando inicialmente aisladas a 12.314 personas. Hoy 6.575 permanecen en esa condición. Por lo que el gobierno está reparando “con suma urgencia” caminos y puentes. Y, a diez días del inicio de la emergencia, algunos de ellos siguen interrumpidos.

Según reportó el Ministerio de Obras Públicas (MOP) y el de Transportes y Telecomunicaciones (MTT), la catástrofe cortó 42 caminos, afectó 30 puentes y alteró el funcionamiento de 12 servicios ferroviarios.

Asimismo, produjo “330 eventos de afectación en la infraestructura” -esto es, a servicios sanitarios rurales, embalses, cauces, entre otros-, de los cuales 133 ya fueron superados.

Respecto de los 42 caminos, 38 de ellos ya recuperaron conectividad. Por ejemplo, la N-485 (Coihueco, Región de Ñuble), que se vio afectada por la crecida del río Niblinto, y volvió a otorgar conectividad a 2.100 familias. Allí también el MOP habilitó un camino de emergencia en un predio particular (en la N-479), beneficiando a otras 100 personas, en su mayoría adultos mayores.

Pero aún quedan cuatro vías con interrupciones, como la Ruta 5; carretera estructurante que conecta al país de norte a sur.

La carretera presenta dos “puntos críticos”, afectados por socavones: el puente Lircay, en el km 249 (Región del Maule), donde sólo hay habilitada una pista por sentido; y el sector Laja, en el km 477 (Región del Biobío), con desvío a través de un bypass momentáneo, mientras la Dirección de Vialidad avanza con los trabajos. Este último “debería estar habilitado en unos 5 días más”, dijo a La Tercera la ministra de Obras Públicas, Jessica López.

La secretaria de Estado agregó, respecto de los caminos, que “seguiremos trabajando en la medida que las condiciones meteorológicas así lo permitan”.

Respecto de los 30 puentes, 20 permanecen cortados por daño estructural y otros 7, a modo de precaución. Los 3 restantes tienen una alternativa también con bypass.

Al mismo tiempo, tres pasos fronterizos permanecen cerrados, producto del evento: Los Libertadores (Región de Valparaíso) y Pehuenche y Vergara (Región del Maule).

Sobre la Ruta internacional 60-CH Los Libertadores, el MOP indicó que “se ha ido habilitando hasta el sector Guardia Vieja”, pero permanece sin tránsito y se están realizando trabajos de emergencia por socavones.

Sobre dicho paso, Sergio Pérez, presidente de la Confederación Nacional del Transporte de Carga Terrestre de Chile, comentó que “la situación que se registra en el cruce de Los Andes es muy compleja, porque hay 3 mil camiones que se encuentran detenidos hace varios días, con conductores que deben esperar en muy malas condiciones, con carga que requiere llegar a tiempo a destino, y donde las autoridades no han sido diligentes en informar oportunamente cuándo se habilitará la ruta”.

Pérez criticó que “tenemos un complejo aduanero del lado chileno, en el que se invirtieron USD 200 millones, y está subutilizado. Tenemos un sistema aduanero tercermundista. Hay que explorar otras alternativas, como habilitar el paso Pehuenche, que es bastante más seguro, con mayor luz de día y más expedito. Lamentablemente no hay voluntad política de los Estados de ambos países para eso”.

En esa línea, la Ruta Internacional Pehuenche “está cerrada hasta que la podamos evaluar y hacer los trabajos de reparación” dijo a este medio la ministra López.

Finalmente, en el paso Vergara -que cierra todos los inviernos y ya se encontraba cerrado para el tránsito vehicular cuando ocurrió el sistema frontal- se identificaron 3 socavones que serán reparados a partir de los próximos días por la Dirección de Vialidad.

Desde el Ministerio de Transportes informaron que, de los doce servicios afectados por las lluvias, nueve ya se encuentran operando con normalidad: EFE Curicó, EFE Valparaíso, EFE Nos, San Fernando, Talca-Constitución, Biotren, Laja-Talcahuano, Victoria-Temuco y Temuco Pitrufquén.

No obstante, quedan dos que no están funcionando: Chillán, producto de los daños que registró el puente Longaví; Chillán-San Carlos, el cual depende de la revisión que se haga del puente Ñuble.

Y en Rancagua, el tren está operativo, pero presenta intervalos de 20 minutos en hora punta, y no de 15, que es lo habitual.