Crisis presupuestaria sigue: situación “catastrófica” del Hospital Van Buren paraliza atenciones y Colmed alerta más casos

Diversos profesionales del Hospital Carlos Van Buren de Valparaíso alzan la voz para, según dicen, advertir una “catastrófica situación” que enfrenta el recinto debido a la falta de recursos, lo que ha generado graves problemas en la atención de los pacientes. En una declaración pública denuncian demoras en atenciones y tratamientos oncológicos, falta de medicamentos para patologías graves, imposibilidad de realizar cirugías complejas por falta de insumos o ausencia de profesionales en funciones críticas porque el hospital no ha podido pagar sus servicios. Además, señalan que el presupuesto asignado es insuficiente y que los aportes extraordinarios, que en años anteriores mitigaban la crisis, no han sido entregados, dejando al hospital “agonizando”.

“Necesitamos que las autoridades tomen medidas urgentes para regularizar el financiamiento del hospital y así garantizar una atención digna y de calidad para sus usuarios”, exige el comunicado.

La situación parece un déjà vu. El hospital, uno de los más grandes de la región de Valparaíso, ha enfrentado repetidas crisis presupuestarias que han afectado su funcionamiento. En septiembre tuvieron que suspender por varios días pabellones de cirugías y en diciembre la unidad de oftalmología también dejó de funcionar porque no contaban con los recursos para pagar a los especialistas, lo que llevó a la suspensión de atenciones y retrasos en procedimientos clave.

“La grave crisis presupuestaria que está afectando a los hospitales y centros de salud de nuestra región y del país tiene como uno de sus principales exponentes al Hospital Carlos Van Buren, que se ha visto asfixiado por la falta de una asignación presupuestaria adecuada para enfrentar las necesidades de salud de la población. Esto ha generado que se le cierren líneas de crédito y que algunos proveedores hayan bloqueado al hospital. En términos simples, significa que hay pacientes traumatológicos que llevan más de un mes esperando cirugía y no pueden ser operados porque los insumos necesarios para las intervenciones no están disponibles debido a estas restricciones financieras”, detalla el presidente del Colegio Médico de Valparaíso, Ignacio de la Torre.

Mientras, el senador RN de la zona, Francisco Chahuán, afirma que “realmente indigna la falta de priorización y premura para enfrentar los temas. Acá estamos hablando de vida o muerte, pero parece que a nadie le interesa. Había fondos para comprar una casa de un expresidente por cerca de mil millones de pesos, pero no hay recursos para inyectar de urgencia al Van Buren para que pueda seguir funcionando con normalidad. Eso no es comprensible”.

Desde el Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio, institución de la que depende el centro asistencial, destacan el aumento del 14% en el presupuesto 2025 y el trabajo conjunto para mejorar la gestión administrativa y fortalecer los mecanismos de control interno del hospital.

De acuerdo al organismo, esto ha permitido ordenar los procesos de compras y flujos financieros, planificar el abordaje progresivo de la deuda pendiente, cumplir compromisos con proveedores para garantizar la continuidad asistencial y monitorear permanentemente la demanda de recursos en el sector salud.

Además, recuerdan que en 2024 se iniciaron conversaciones para un nuevo hospital, cuyo proyecto está en análisis y cuenta con financiamiento para la compra del terreno en el presupuesto 2025.

Pero la situación del Hospital Carlos Van Buren no es un caso excepcional. De acuerdo a los especialistas estos problemas se repiten en toda la red asistencial.

De hecho, el problemático escenario financiero que enfrentan los hospitales no es un secreto. De acuerdo al informe que envió la Subsecretaría de Redes Asistenciales al Congreso -al que tuvo acceso La Tercera-, para el término del primer semestre del 2024, la deuda de la red hospitalaria completa asciende a 112 mil millones de pesos. El tema es que esa cifra implicaba un incremento significativo, pues es un 147% más que el mismo periodo del año pasado, cuando el monto se cifraba en 76 mil millones.

Esto también es refrendado por quienes están en las entrañas del sistema. “En la Región Metropolitana tenemos casos como el Hospital El Carmen de Maipú, que tuvo que cerrar pabellones de UCI. Y este cierre está acompañado de la falta de dinero para externalizar a los pacientes a otros prestadores. Otros hospitales han logrado sortear la crisis con deuda y reduciendo los servicios al mínimo para seguir funcionando”, cuenta la presidenta del Colmed Santiago, Francisca Crispi.

Respecto al origen del problema, la especialista advierte que se debe a cómo se distribuyen los fondos: “Siempre ha existido un manejo del presupuesto hospitalario que hemos criticado: el que se le da a los hospitales no cubre realmente lo que necesitan. Se parte con un presupuesto inicial que cubre parte del año y luego se entregan remesas para cubrir el endeudamiento del resto del año.Lo nuevo es el manejo de estas remesas, que ha provocado que los hospitales empezaran este año con un presupuesto reducido, porque tuvieron que pagar con el presupuesto 2025 parte de la deuda 2024. Eso no se había visto antes”.

Por otra parte, la presidenta nacional del Colegio Médico, Anamaría Arriagada, advierte que “nosotros, como colegio, siempre mantendremos una actitud de vigilancia activa y defenderemos al sector salud de cualquier recorte presupuestario, asegurando que estén los recursos para la campaña de vacunación, que ya se inició, para enfrentar bien el invierno en las próximas semanas y para cumplir con las listas de espera. Esos son los bienes más importantes que vamos a defender, y por eso es fundamental asegurar los recursos para el sector salud”.