¿Cuántas derechas hay en la derecha? El debate del sector en medio de la pandemia

Dos derechas: una reciente y otra histórica. Esa fue la clasificación que explicó el académico de la Universidad Diego Portales, Hugo Herrera, en su última columna de opinión en La Tercera y que reabrió un viejo debate en el sector: ¿Cuántas derechas hay y cómo se traducen actualmente en el espectro político?

A pesar de esa clasificación, Herrera dice mantener la distinción de las cuatro corrientes ideológicas dentro de la derecha: la liberal cristiana asociada a la UDI, la socialcristiana ligada a algunos sectores de RN, la liberal laica que tiene su constatación en Evópoli y la estatista laica que calza con las ideas del actual presidente de RN, Mario Desbordes.

Sin embargo, el filósofo agrega que este panorama se puede reducir a “dos derechas” por culpa de una especie de “tapón economicista”. Las dos derechas se clasifican como una “reciente”, influenciada por los Chicago Boys y el gremialismo y que fue hegemónica en la dictadura y la transición; y una histórica, asociada a figuras como Desbordes y el ministro Cristián Monckeberg que es “consciente de que comprender políticamente requiere atender al pueblo en su territorio, a su unidad y diversidad social y cultural, para brindarle, a ese pueblo, una articulación institucional pertinente”.

Herrera cree el escenario de dos derechas se debe a que “hay un tapón puesto por la derecha económica que no es una vertiente política, es una trenza de dos cosas: economicismo duro, o sea reducir la política a la economía, que es lo que hace Libertad y Desarrollo y parte de la UDI, y por otra parte, el contubernio entre poder económico y poder político”.

Hoy, de hecho, los diputados de RN Diego Schalper y Luis Pardo le respondieron a Herrera con otra columna llamada “Muchas derechas: diversidad y unidad”.

“No reconocer la contribución que han hecho los planteamientos económicos y sociales de la centroderecha en el desarrollo que ha tenido Chile los últimos 30 años resulta tan deshonesto como conceder acríticamente dichos planteamientos, eludiendo la tarea de mejorar nuestro modelo de desarrollo en los tiempos que corren. Dicho de otro modo: más que confrontar distintas posiciones políticas en la centroderecha, lo que se requiere es complementarlas (…)”, escribieron los diputados de RN.

Siguiendo el debate, en La Tercera PM le preguntamos a miembros de las fundaciones y centros de estudios ligados a este sector, sobre qué opinan de la visión de Herrera y cómo se proyectan este análisis en las caras de los actuales partidos.

Leonidas Montes, director del Centro de Estudios Públicos (CEP), valora que “exista un debate así dentro de la derecha y que hayan nuevos intelectuales, como Hugo Herrera y Daniel Mansuy que tienen una orientación más gongoriana o conservadora, es digno de celebrar”.

Sin embargo, no comparte el análisis de Herrera. “Hay toda una corriente conservadora que apela a esto y a la crítica generalizada al economicismo, de reducir un periodo solo en la economía. En ese punto, creo que se equivoca. Las circunstancias no son tan así y él tiene una especie de obsesión con Milton Friedman e ignora que estos problemas son realidades políticas, económicas y sociales más complejas. Él trata de simplificar este economicismo que es discutible a lo menos”, agrega Montes.

El director del CEP señala que hay una “cruzada contra la economía que no es tal” y que “sobre simplifica el debate”. “Me produce cierta inquietud cuando vienen propuestas que obedecen a agendas personales, sin duda. Es natural que las ideas encuentren su cauce político y en ese sentido es bueno que haya una mirada política”, comenta Montes sobre la cercanía entre Herrera y el timonel de RN.

Por su parte, Sebastián Izquierdo, director ejecutivo de Horizontal -think tank ligado a Evópoli-, coincide con Montes en su crítica al académico UDP.

“El factor económico ha unido a la derecha en el tiempo, desde conservadores a liberales. Estos meses las divisiones han obedecido a otros hechos, como lo es la distinción entre políticas técnicamente responsables, dentro de la ley, y otras que responden más a fines personalistas y poco republicanos. Desde Horizontal, creemos profundamente en políticas públicas reformistas, pero a la vez, técnicamente muy sólidas”, señaló Izquierdo.

Asimismo, el director ejecutivo de Horizontal cree que en Chile Vamos están representadas las derechas que existen actualmente. “Si bien dentro de los partidos políticos de la derecha hay diferencias, éstas se producen dentro de la misma reflexión de cada espectro ideológico: liberales, republicanos, conservadores, socialcristianos. El desafío de los partidos oficialistas, desde las legítimas diferencias, es la unidad para obtener un mejor gobierno para la ciudadanía”, comentó.

Izquierdo concluye valorando el debate que reabre Herrera aunque critica la forma en que se da. “Es importante dado que da la opción de debatir nuestras ideas, con el debido pensamiento crítico que todo debate conlleva. Pero el costo se hace mayor, cuando el debate se genera por la prensa, ya que genera dificultades adicionales en la coordinación de las fuerzas políticas, capaces de impulsar políticas públicas adecuadas para la actual crisis”, agregó.

Para Felipe Lyon, director de Servicio Público de la Fundación Jaime Guzmán, la visión de Herrera es “reduccionista”. “La derecha es un espacio de convergencia de muchas corrientes diferentes, cada una con sus diagnósticos, énfasis y aportes. Intentar dividir eso en dos me parece poco realista, y quizás el profesor lo hace para favorecer a algunos liderazgos en particular, que suele nombrar en sus columnas”, señaló Lyon.

Agrega que en Chile “hay muchas sensibilidades de derecha, algunas sin expresión política, pero agruparlas no siempre es tan sencillo”. “Pero más que enumerarlas y separarlas, creo que todas ellas debiesen entrar en diálogo sincero para construir un proyecto, un horizonte de país. No auto dividirse en ‘buenos’ y ‘malos’ y descartar algunas visiones a priori, que es lo que parece estar transmitiendo el profesor Herrera”, comentó Lyon.

Lyon cierra indicando que “la política son ideas y también acción”. “El equilibrio está en comprender que, a pesar de que estas discusiones se dan más en las élites, si tienen impacto en la vida de la gente. En ese sentido, hay que tener especial cuidado. Hay una delgada línea entre abrirse escuchar la voz de la gente, cuestión muy necesaria hoy, y caer en el populismo irresponsable. La importancia de una fuerte institucionalidad, hoy tan atacada,me parece, por ejemplo, un buen punto de partida para esta discusión de lo que une a ‘las derechas'”, indicó el miembro de la Fundación Jaime Guzmán.