Dávalos vuelve a la carga contra Canal 13: Acusa "daño irreparable" y cita a la presidenta del CNTV por Yerko Puchento

Jorge Alberto Sebastián Dávalos Bachelet (40) insiste en hacer valer su postura en tribunales en contra de Canal 13 por las rutinas de humor del personaje Yerko Puchento, interpretado por el actor Daniel Alcaíno.

El hijo de la ex mandataria Michelle Bachelet presentó en el día de ayer un escrito de réplica a la contestación de la demanda que efectuara hace una semana la estación televisiva controlada por Andrónico Luksic, y a la cual el ex jefe de la División Socio Cultural de La Moneda exige una indemnización de $3.360 millones.

Dávalos, representada por la abogada Carolina Álvarez, acusó un "daño irreparable", tanto a su vida privada, su honor y su situación económica, "haciendo perfectamente razonable y posible el demandar por concepto de daño emergente, lucro cesante, y por daño moral".

De paso también refutó la defensa de Canal 13, liderada por el abogado Alejandro Espinoza que asegurara que "la imagen de Sebastián Dávalos Bachelet y de su mujer Natalia Compagnon, estaban seriamente afectadas previo al estallido del denominado caso Caval".

"Podemos afirmar categóricamente que jamás el señor Dávalos Bachelet fue nombrado con algún apodo que lo denostase, sino hasta la ocurrencia de los hechos ilícitos de la demandada", aseguró la abogada de Dávalos.

Por otro lado, aseguró que Canal 13 ha generado una "demanda alternativa" para "incluir en toda su presentación" justamente a Natalia Compagnon. Más aún. Señaló que no existe razón para que la nombrara en su respuesta. Al no ser demandante en esta causa, la única razón de la actitud de la demandada es el desviar la atención de lo demandado, sostuvo.

"La demandada justifica su actuar negligente, y/o su actuar doloso, indicando expresamente que si una persona concurre a defenderse a los tribunales del país puede ser objeto de escarnio público, burlas, creación de improperios, no importando en lo más mínimo no sólo la dignidad por el hecho de ser persona, sino además el resultado de las investigaciones penales-vulnerando el principio de inocencia justificando un supuesto derecho a ridiculizar a una persona por el hecho de ser sujeto de investigaciones", lanzó la defensa de Dávalos.

Igualmente reiteró que en los últimos tres años, y de forma consistente y periódica, el personaje Yerko Puchento durante sus intervenciones en el programa Vértigo "profirió injurias y se burló a mansalva de la situación judicial de Sebastián Dávalos Bachelet, de su familia, de su trabajo, incluso de su apariencia física y modo de vestir, verbigracia, el hijo del año, epidemia con aros, ladrón, y otras de peor entidad".

La defensa de Dávalos detalló que entre enero y julio de este año el Consejo Nacional de Televisión (CNTV) ha recibido 2.803 denuncias. De ellas 276 quejas fueron realizadas en mayo, de las cuales 126 eran — justamente— en contra de las rutinas de Yerko Puchento". "Es decir, respecto de todas las denuncias recibidas por este organismo, respecto de todos los programas existentes de TV abierta, de cable y satelital, casi el 10% de ellas iban dirigidas en contra de las rutinas del dependiente de la demandada",

De igual manera, la réplica citó a la Presidenta del CNTV, Catalina Parot, que en entrevista con El Mercurio, sostuvo: "No nos olvidemos de que antes el humor ridiculizaba a los homosexuales, a los discapacitados, al cojo. Siempre se basó en los defectos físicos. Hoy la medida con la que se ve eso es completamente diferente y Canal 13 siguió mostrando a un personaje que atenta contra la dignidad de las personas".

"Lo que hizo (...) con Cecilia Pérez fue de mal gusto, una falta a la dignidad de la persona y también con Dávalos. No solo se rió del físico de él y lo mantiene, sino que, además, asumió una culpabilidad y una sentencia antes de que hubiera una pronunciación en tribunales", sostuvo Parot.

"Si la Presidenta del Consejo Nacional de Televisión, que es el organismo más especializado existente en el país, indica que es claro que lo realizado por el dependiente de la demandada constituye una falta a la dignidad de las personas, no sólo porque ridiculizó a mi representado por su aspecto físico, sino además por asumir una culpabilidad y una sentencia previa a la de tribunales, creemos que es claro y contundente que lo indicado por la demandada no resiste soporte ni análisis", remató la defensa de Dávalos.