Dos semanas de alza consecutiva y tasa creciente de contagios: la cuarta ola de Covid ya está aquí
Asociado a ómicron, el rebrote de la última quincena ya se consolida como una cuarta ola, con una velocidad de contagio que no había sido vista hasta ahora. El aumento tiene características distintas a brotes anteriores: hasta el momento, la tasa de internación se mantiene controlada y Salud reporta que de los más de tres mil contagios positivos comprobados por el Instituto de Salud Pública (ISP) para la variante, aún no se registran muertes.
Ya iniciado el brote en el país asociado a ómicron, las tasas semanales de nuevos casos han superado todos los récords de olas anteriores. Los expertos coinciden en que, como se ha visto en el mundo, podría alcanzarse un récord de contagios muy por sobre lo registrado hasta ahora. Incluso, se ha proyectado llegar a una incidencia diaria entre los 20 mil y 40 mil casos.
Así, acorde al modelo establecido por académicos de la Universidad de Santiago (Usach), una nueva ola de la enfermedad se inicia cuando se cumplen dos requisitos: la tasa de incidencia de las últimas dos semanas es mayor a 70 casos semanales por cada 100.000 habitantes (o un promedio diario de 10 casos por cada 100.000 mil personas), además de una tasa de incidencia de la última semana mayor a los siete días previos. Bajo ese criterio, Chile ya cursa una cuarta ola a nivel nacional (ver gráfico).
“Este brote puede seguir duplicando sus casos en el futuro, lo que podría hacer llegar a más de 15 mil casos el día viernes. La ola ha sido de aumento fuerte, de duplicar casos semana a semana, lo que es muy característico de olas de variante ómicron. Todo hace pensar que la velocidad se va a mantener por al menos una semana más y vamos a llegar a niveles históricos de contagio. El comportamiento es de alzas rápidas y la gran duda es si va a bajar a la misma velocidad a la que está subiendo, en el Reino Unido está sucediendo eso”, dice Felipe Elorrieta, académico Usach y parte del Grupo Epidemiológico Matemático.
Sin embargo, con el amplio porcentaje de la población inoculada con refuerzo, las expresiones de la enfermedad entre los contagiados podrían ser más leves.
Ocupación hospitalaria aún controlada
Según la información disponible hasta ahora del informe epidemiológico de variantes del Minsal, de 3.106 muestras positivas secuenciadas compatibles para ómicron, solo un 53,8% de los detectados reporta síntomas, 17 han debido ser hospitalizados y solo cuatro en UCI. ¿Los decesos? Entre los positivos comprobados por el Instituto de Salud Pública (ISP) para la variante, aún no se registran muertes.
El mejor escenario se configuraría si el alza -que ha alcanzado la mayor velocidad de toda la pandemia- tiene un descenso brusco tras el peak, luego de varias semanas de transmisión acelerada.
El académico en salud pública de la mencionada casa de estudios, Claudio Castillo, asegura que “estamos viviendo aumento exponencial de casos. En los últimos siete días, el promedio diario de casos es de 8.606: un 214% más que la semana anterior, que fue de 4.031 casos y un 528% de la semana antepasada, donde el promedio fue de 1.631 contagios semanales”.
Castillo añade que “este aumento está en todas las regiones del país, de acuerdo a las estimaciones que hemos hecho en la Usach mediante una metodología que ha sido validada con revisión de pares, internacionalmente. Chile cumple hoy con los criterios para decir que estamos frente a una cuarta ola. Lo positivo es que este aumento de casos aún no conlleva un aumento importante de hospitalizaciones”.
Así, el académico detalla que en la última semana solo creció un 2% el total de hospitalizados, pero concentrados principalmente en camas básicas y medias. Y si bien en las camas básicas el aumento fue de un 15%, en las UCI la ocupación bajó un 9% y los pacientes ventilados también descendieron un 11% respecto de la semana anterior. “La cuarta ola está asociada a ómicron y no se ha traducido todavía en aumento importante de la ocupación asistencial, pero tenemos que ver cómo evoluciona en 14 días más”, concluye Castillo.
En los centros hospitalarios, el jefe de la Unidad de Paciente Crítico de Clínica Indisa, Sebastián Ugarte, señala que la demanda está concentrada principalmente en la consulta ambulatoria -incluyendo horas médicas, urgencia y teleconsultas- y en los exámenes PCR confirmatorios. “No se ha producido aún un gran incremento en hospitalizaciones. La mayor parte de pacientes tiene síntomas leves, guarda reposo en el domicilio y, en menor medida, quienes han requerido hospitalización tienen enfermedades crónicas o corresponden a personas no vacunadas”.
A la ecuación de proyecciones de casos y gravedad de los mismos, plantea Ugarte, hay que sumar “las características diferenciadoras de nuestro país versus otras naciones. Tenemos una alta tasa de vacunación y por sobre un 80% de adherencia al uso de mascarilla, lo que impacta en los modelos predictivos, no es lo mismo que EE.UU. o más cercano en Argentina”.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.