El fútbol se abastece para el regreso: casi $ 3 millones en insumos para cada club cada 20 días

En paralelo al aumento de las restricciones debido a la explosión de los contagios por Covid-19, el fútbol chileno planifica un regreso a la seminormalidad, con la desesperación financiera que ha provocado la inactividad de la industria y sin una fecha clara a la vista, más allá de las buenas intenciones. En este contexto, el martes en la tarde, la gerencia general de la ANFP envió a los clubes un oficio con el detalle de los insumos que se utilizarán en ese tan esperado retorno y cómo se distribuirán entre los socios.

Mascarillas, alcohol gel, papel para camillas y termómetros electrónicos son parte de lo que se podría denominar el nuevo kit de supervivencia del balompié criollo. La Comisión Retorno del Fútbol prefiere hablar de “kit de seguridad”, según se indica en el encabezado del texto remitido a los equipos profesionales.

“Para la correcta implementación de la Primera Etapa del retorno a la actividad deportiva del fútbol profesional, que consiste en el regreso a los entrenamientos, la subcomisión médica ha definido la necesidad de contar con un kit básico de seguridad (en adelante el “Kit de Seguridad”). Según ha detallado la propia subcomisión, el Kit de Seguridad deberá estar compuesto por mascarillas y guantes, ambos desechables, alcohol gel y dispensadores, jabón y dispensadores, termómetros láser y papel continuo para protección de camillas y secado de manos, y un test inmunológico”, indica el texto recepcionado por las instituciones.

El documento, eso sí, viene con mucho más detalle que la simple enumeración de insumos. La ANFP incluyó tablas con cantidades por club, días de uso y hasta el costo que tendrá para cada dirigencia (ver láminas). Así, por ejemplo, se especifica que cada institución recibirá 2.400 mascarillas, 2.400 guantes, 10 litros de alcohol gel, entre elementos, que se irán renovando cada 20 días y que están pensados para un control de 40 personas. También se entregarán utensilios de control, como termómetros electrónicos (5 por club) o dispensadores de jabón y alcohol gel (5 de cada uno). Por otro lado, desde Quilín se comprometieron a entregar tests inmunológicos, aunque la cantidad y el tipo de examen dependían de las indicaciones que debe entrega un asesor experto en enfermedades infecciosas.

“El cumplimiento del protocolo está definitivamente diseñado con el objeto de retornar a la actividad deportiva del fútbol profesional de la manera más segura para todos sus participantes, siempre enmarcados dentro de las normas impartidas por la autoridad sanitaria”, destaca el oficio despachado desde la ANFP. Y con la exigencia de que el kit se use de “manera uniforme y oportuna, en el entendido que una eventual falla y/o no cumplimiento del protocolo de uno de nuestros clubes, aumenta ostensiblemente el riesgo de contagio y en consecuencia pone en riesgo la seguridad de cada una de las personas intervinientes en el retorno, afectando gravemente el desarrollo de la actividad en su conjunto”.

Respecto al costo de los implementos sanitarios, la ANFP aclaró que será de $ 2.890.020 por club. La cifra será descontada de la mensualidad del CDF que recibe cada socio. También se incluye a los equipos de la Segunda División, que no reciben una tajada de la televisión, pero que podrán optar al kit, pagando vía transferencia electrónica a la cuenta corriente de la asociación. La inversión total será del orden de los $ 130 millones.

Desde la sede central del balompié nacional destacaron también que los proveedores de estos productos fueron validados por el portal de compras de la ANFP y por el área de cumplimiento. “Adicionalmente, a todos los proveedores cotizados se les solicitó acreditar la certificación de los insumos según los requerimientos de la Subcomisión (médica), circunstancia que han cumplido”, indica el oficio redactado en Quilín.

El fútbol está en etapa de abastecerse, pensando en un retorno que hoy, después del decreto de cuarentena total en la Región Metropolitana, se sigue viendo muy lejano. Las proyecciones más positivas apuntan a volver entrenar en junio. El desarrollo de la pandemia, sin embargo, choca con las intenciones de la industria.