Aplicado a medias: el informe de 2021 en que Conaf recomendaba cortafuegos en zonas quemadas en los recientes incendios

“Dada su creciente población que va emplazándose en áreas de interfaz urbano forestal, nace la necesidad de generar estrategias que ayuden a evitar los incendios forestales y a mitigar los daños que puedan ocasionar estos”. De esa manera, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) defendía en 2021 la necesidad de contar con un plan de prevención y mitigación de incendios forestales en la comuna de Viña del Mar, en la Región de Valparaíso. La misma zona que hoy, tres años más tarde, enfrenta una de las emergencias a nivel nacional más catastróficas desde el terremoto de 2010, con 131 fallecidos y más de 18 mil damnificados.

El informe, de 88 páginas, titulado Plan de protección contra incendios forestales para Viña, y al que tuvo acceso a La Tercera, detallaba la necesidad de contar con distintos ejes de prevención en las zonas más críticas de la comuna. Entre estos se destacaban patrullajes preventivos, limpieza de pastizales, fiscalización forestal, erradicación de microbasurales y la implementación de cortafuegos, los que, según Conaf, eran “de suma importancia, por una parte, como medida de protección a la comunidad y también para otorgar mayor facilidad para que las unidades de emergencia puedan llegar, disminuyendo la posibilidad de daño a la población u otros”.

En concreto, Conaf indentificó 10 sectores a nivel comunal donde estas medidas se tornaban de suma necesidad por ser áreas de mayor riesgo. Gran parte de estas quedaron bajo las llamas durante los incendios forestales del 2 de febrero: Nueva Aurora - Viña del Mar Alto; Forestal - Chorrillos; Canal Beagle; Miraflores - Villa Dulce; Achupallas - El Olivar; Gómez Carreño; Reñaca; Reñaca Alto; Glorias Navales y Villa Hermosa. En total, en 2021 Conaf proponía la instalación de 115.386 metros de cortafuego en 42 áreas.

Allí se presentó una propuesta de ‘Obras de mitigación’ y actividades relacionadas al manejo de arbolado para que las entidades municipales y otros servicios pudieran gestionarlos y realizarlos. La población también fue interpelada para realizar cortafuegos perimetrales y manejo de arbolado al interior de sus terrenos, sobre todo en lugares de mayor riesgo debido a que la vegetación existente en quebradas y cerros tenían una gran altura y nula mantención, acompañado por microbasurales en las quebradas cercanas a viviendas.

El sector de Achupallas - El Olivar fue una de las zonas más golpeadas por las llamas de inicios de febrero. Según indicaba Conaf en su plan de mitigación, para esa zona era necesario construir 10.967 metros lineales de cortafuegos en cuatro sectores específicos con previa coordinación entre el municipio y los vecinos. Según señalaron en su momento desde Conaf, la zona podía verse afectada por los incendios provenientes del Jardín Botánico.

Asimismo se visualizó en la zona de Canal Beagle, donde se propuso la construcción de 2.089 kilómetros lineales de cortafuegos desde calle Trinidad hasta conectar con Canal Sarmiento y de Canal Sarmiento hasta Caleta Baker, rodeando la población. Si bien Conaf señaló que “la población de Canal Beagle no es un lugar donde se originen incendios con recurrencia”, en el pasado sí se había visto afectada por incendios proyectados desde Chorrillos y el área del Jardín Botánico.

Incluso se ideó la instalación de 31.070 metros de cortafuegos para el sector de Forestal - Chorrillos, definido como sectores “especialmente vulnerables” de sufrir daños por incendios forestales al encontrarse en proyección de vientos durante el verano y quebradas, donde estos se encajonan y toman velocidades elevadas. A esto se sumaba su lejanía con unidades de emergencia y accesos para ayuda por lo angosto de sus caminos.

Desde la Municipalidad de Viña del Mar señalan a este medio que estaban al tanto de tal informe. Y que a principios de octubre de 2023 solicitaron a la Dirección de Viabilidad de Valparaíso y a sus direcciones regionales dependientes documentos frente a la situación de los incendios en la región. Además, señalan que desde septiembre a la fecha se concretó el plan de cortafuegos para 58,5 de los kilómetros propuestos, proceso dirigido por la Dirección de Operaciones y Servicios, a través de maquinaria con coordinación vecinal. A eso, agregan, “se hicieron desmalezados por más de 48 mil metros lineales. Con todo, se pidió ayuda a más de cinco organismos públicos para reforzar la tarea: Delegación, Senapred, Conaf y MOP”, debido a la magnitud del crecimiento de la vegetación, la falta de recursos municipales y la imposibilidad de entrar a predios privados con facilidad.

Esta última razón, de hecho, llevó a que no se pudieran concretar todos los cortafuegos propuestos por Conaf debido a que, según señalan desde el municipio viñamarino, “lamentablemente en los más de los 473 predios en los que tenemos que hacerlo, del orden de 435 son privados, sin tener nosotros la autorización y capacidades para poder entrar en ellos (...). Por eso, en septiembre y octubre se envió notificación a los dueños de los recintos para que despejaran y limpiaran en el marco de la ley vigente de Urbanismo y Construcciones”.