El polémico historial de Diosdado Cabello, el dirigente chavista apuntado por el crimen de Ronald Ojeda

El ministro del Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, muestra un fusil M4A1 incautado durante una sesión en la Asamblea Nacional, en Caracas, el 17 de septiembre de 2024. Foto: Reuters

El actual ministro del Interior, Justicia y Paz de Venezuela es considerado como una de las figuras “más poderosas” y “más temidas” del régimen de Maduro.


En su cuenta de X, él mismo se describe como “venezolano, bolivariano, revolucionario y chavista radical”. Considerado el socio principal del régimen venezolano, Diosdado Cabello ha estado por más de 25 años en el ala más radical del chavismo. Con acusaciones de narcotráfico a cuestas por parte de Estados Unidos, que ofrece una millonaria recompensa por su captura, ahora el actual ministro del Interior, Justicia y Paz de Nicolás Maduro suma un nuevo cargo a su polémico historial: ser el posible responsable del encargo y pago por el crimen del exteniente venezolano Ronald Ojeda, ocurrido en febrero de 2024 en Chile.

En diálogo con T13 Radio, el fiscal nacional Ángel Valencia confirmó la mañana de este jueves la tesis del fiscal regional de la Fiscalía Metropolitana Sur y coordinador del Equipo de Crimen Organizado y Homicidios (ECOH), Héctor Barros, en torno al crimen del disidente del gobierno de Maduro y asilado político en Chile. Esto, luego de que el persecutor apuntó que el secuestro y posterior homicidio, ocurrido en territorio chileno, tuvo un móvil político vinculado al régimen de Caracas.

“El fiscal (Héctor) Barros me confirma que efectivamente hay tres personas que declaran en la investigación que atribuyen el encargo a autoridades del gobierno venezolano y a lo menos una de esas personas (...) manifestaría que el encargo y el pago habría venido del señor Diosdado Cabello”, afirmó la máxima autoridad del Ministerio Público. “Hay antecedentes muy sólidos en la carpeta de investigación para entender que este es un secuestro con homicidio por encargo (…) con motivaciones políticas”, agregó Valencia.

Ojeda fue secuestrado el 21 de febrero de 2024 en su casa en Santiago y sus restos fueron encontrados 10 días después, sepultados debajo de un bloque de cemento. A días del hallazgo del cuerpo del exmilitar venezolano en una toma de Maipú, a través de un programa del canal estatal Venezolana de Televisión (VTV), Cabello se refirió al caso.

“Venezuela no tiene nada que ver con ese secuestro, nada, arreglen su problema allá en Chile. Sigan dándole protección a mafiosos, que la propia mafia les cobra”, aseguró el número dos del chavismo en esa oportunidad.

Presidente por cinco horas

Cabello no es cualquier ficha dentro del chavismo, asegura BBC Mundo, que recuerda que el militar retirado de 61 años es considerado por muchos una de las figuras “más poderosas” y, también, de las “más temidas” del régimen.

La revista colombiana Semana añade que la trayectoria de Cabello “combina una formación militar con una extensa carrera política y represión, marcada por su lealtad hacia Hugo Chávez y su firme postura con respaldo a la dictadura, sin importar las consecuencias para su pueblo”.

Nacido en 1963 en El Furrial, estado Monagas, su padre lo nombró en honor al noveno presidente filipino Diosdado Macapagal (1961-1965). Su padre, Adrián, militó en Acción Democrática, uno de los partidos dominantes hasta la irrupción del chavismo. “No era de los adecos de ahora, era siempre combativo, respetado”, justificó una vez.

Militó en la juventud de Acción Democrática y en otros movimientos antes de entrar a la Academia Militar con 19 años. Cabello se graduó como ingeniero en el Instituto Universitario Politécnico de las Fuerzas Armadas Nacionales, donde forjó una estrecha relación con Hugo Chávez. Participó activamente en el fallido golpe de Estado de 1992 liderado por este, lo que consolidó su posición dentro del movimiento bolivariano.

Diosdado Cabello en una emisión de su programa de televisión.

Tras la llegada de Chávez al poder en 1999, Cabello ocupó diversos cargos gubernamentales de relevancia. Fue nombrado ministro de Interior y Justicia en 2002 y, posteriormente, vicepresidente ejecutivo de Venezuela. Durante el breve golpe de Estado de abril de 2002, que sólo duró dos días, asumió temporalmente la Presidencia -durante 5 horas y 15 minutos- y garantizó el retorno de Chávez, lo cual consolidó la confianza que el régimen tenía en él. Entre 2012 y 2016, presidió la Asamblea Nacional, consolidando así también su influencia en el ámbito legislativo.

Posteriormente, en 2018, asumió como presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, organismo controlado por el chavismo que no es reconocido por la oposición. Ese mismo año, Cabello recibió sanciones de la Unión Europea, el gobierno de Suiza y el de Panamá. Este último lo consideró una persona de alto riesgo “en materia de blanqueo de capitales, financiamiento del terrorismo y financiamiento de la proliferación de armas de destrucción masiva”. El Departamento del Tesoro de EE.UU., también lo sancionó, junto a su hermano, José David, y a su esposa, Marleny Contreras.

Pero las sanciones no se detuvieron allí. En marzo de 2020, el Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó cargos contra Maduro y otros altos funcionarios venezolanos, incluyendo a Cabello, por delitos de narcotráfico y terrorismo. Se les acusó de participar en una conspiración con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para “inundar” Estados Unidos con cocaína. Washington ofreció una recompensa de 10 millones de dólares por información que condujera al arresto de Cabello.

En enero de 2025, Estados Unidos incrementó la recompensa a 25 millones de dólares, intensificando las sanciones económicas y restricciones de viaje contra funcionarios vinculados al chavismo. Estas medidas buscan presionar al régimen venezolano en medio de denuncias de fraude electoral y cuestionamientos sobre la legitimidad de la reelección de Maduro.

Su rol en la represión

Sin embargo, luego de las polémicas elecciones presidenciales del 28 de julio del año pasado, donde la oposición acusa fraude electoral en contra de su candidato Edmundo González, el rol de Cabello tomó aún más poder. Maduro lo nombró ministro de Interior, Justicia y Paz, siendo esta la segunda vez que ocupa el cargo desde el 2002, cuando Chávez lo nombró para combatir la intentona golpista de Pedro Carmona. “Diosdado trae suerte, en aquella época ayudó al presidente Chávez a establecer la paz. Sabe mucho de paz, de justicia”, expresó Maduro.

“Si el nuevo gabinete es un indicador de lo que Maduro pretende hacer, la designación de Cabello es indicativo de que se viene más represión”, apuntó entonces Juanita Goebertus, directora para las Américas de la organización Human Rights Watch. En la misma línea, el medio venezolano Caracas Chronicles posteó en Instagram un mensaje sobre este nombramiento: “Esto significa que Maduro recurrirá fuertemente a la violencia gubernamental para mantenerse en el poder. Se avecinan días oscuros”.

El presidente Nicolás Maduro, acompañado de Diosdado Cabello, ahora presidente de la Asamblea Constituyente, en un acto en 2018. Foto: Archivo

En efecto, el ministro del Interior venezolano, quien tiene el manejo de las policías, ha sido acusado de potenciar aún más la maquinaria represiva del régimen chavista. El poder de Cabello no sólo reside en su influencia política, sino también en sus presuntos vínculos con las Fuerzas Armadas y los llamados “colectivos”, grupos armados leales al chavismo que operan en barrios populares para intimidar a la oposición. Se le considera uno de los principales defensores del papel de los militares en el mantenimiento del régimen y ha respaldado el uso de estas fuerzas para disolver protestas y garantizar el control territorial, afirma Semana. Asimismo, se le atribuye una red de informantes a quienes llama “patriotas cooperantes” y cuyos reportes revelan conversaciones privadas y supuestos complots de la oposición.

“Hasta ahora ‘se sospechaba’ que Cabello incidía mucho en todo lo que tuviera que ver con inteligencia y represión. Ahora está en la línea de mando, le responsabiliza directamente. Si la consigna es ‘morir matando’ tú estás a cargo, creo que es el mensaje. Es rudo”, comentó a BBC Mundo la politóloga Carmen Beatriz Fernández.

Dardos por TV

El ahora ministro de Interior es una de las caras más visibles del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y tiene la mayor plataforma de propaganda del chavismo, su programa de televisión “Con el mazo dando” y que se emite en el canal del Estado desde 2014.

El programa cuenta con un bloque dedicado a su análisis personalísimo de la prensa y una “Cartelera de la Semana” donde muestra su mordacidad comentando publicaciones de medios o tuits de analistas y políticos críticos al chavismo. En 2023 un informe de Naciones Unidas denunció que el programa es “regularmente utilizado para desacreditar a opositores reales o percibidos, llegando incluso a acusarlos de delitos graves”.

Ha sido precisamente ese programa desde el cual Cabello ha lanzado duros epítetos contra Gabriel Boric. En junio pasado, calificó de “bobo” y “flojo” al presidente chileno luego de que este asegurara que en Venezuela “las instituciones están deterioradas”. En ese contexto, Cabello señaló que Boric es “incapaz de gobernar su propio país”.

El diputado chavista no se limitó a estas críticas y cuestionó severamente la gestión de Boric en temas de derechos humanos. “Tiene preso a los hermanos mapuches, no ha hecho justicia por los muchachos que perdieron ojos y la visión completa en Chile (…) y va a venir a hablar de Derechos Humanos aquí en Venezuela”, declaró.

Su arremetida fue más allá en octubre de 2024, en esa oportunidad, Cabello nuevamente entregó un mensaje a Chile dirigido en el marco de la conmemoración por los 51 años del Golpe de Estado. “Hoy Pinochet tiene un adorador como Presidente. Sueña con que le digan Pinochet segundo”, afirmó en alusión a Boric. Pero los ataques al mandatario no se quedaron ahí y continuaron: “Un traidor a los estudiantes, a los trabajadores, a los movimientos de izquierda, un traidor a la patria grande”.

Desplegado en el Catatumbo

En las últimas horas el paradero de Cabello se ha vuelto noticia en Colombia, tras las denuncias de supuestos sobrevuelos de aeronaves de combate venezolanas en territorio de ese país. Al respecto, se difundieron fotografías del ministro del Interior venezolano en el municipio fronterizo Jesús María Semprún, en el estado Zulia, recibiendo a personas desplazadas de la conflictiva región colombiana del Catatumbo, donde los violentos enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc han dejado hasta el momento más de 100 muertos y alrededor de 36.000 desplazados.

Según Semana, Cabello supervisa personalmente la recepción de los refugiados que han cruzado hacia territorio venezolano en busca de seguridad. En las fotografías divulgadas, se ve a los desplazados descendiendo de un helicóptero y al dirigente chavista interactuando con las familias afectadas, muchas de las cuales han huido de sus hogares debido a la intensidad de los enfrentamientos armados en la región fronteriza.

“Estamos activados con más de 680 combatientes de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), protección civil, policías y bomberos, garantizando la paz y la democracia en esta región estratégica”, dijo Cabello a un medio local.

De acuerdo a la información difundida en las redes sociales del Ministerio del Interior, Justicia y Paz de Venezuela, este miércoles, Cabello activó los ejercicios Escudo Bolivariano 2025 en Zulia, junto a los órganos de seguridad ciudadana y FANB que “se encuentran desplegados para reaccionar de forma inmediata ante cualquier evento adverso en perfecta Fusión Cívico Militar Policial”.

En declaraciones respecto a los ejercicios de Defensa, Maduro confirmó el número dos del chavismo estaba en ese lugar. “Diosdado, que se encuentra al frente de todos estos procedimientos operativos, está por allá apoyando al pueblo de Colombia en el Catatumbo, pero está en tiempo real informándome de todo”, afirmó.

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