El viaje al revés de Mauricio Isla, el chileno que nunca jugó en Chile y sueña con volver
A sus 31 años y apartado recientemente por el Fenerbahçe, el debut del Huaso en el torneo nacional se ve más próximo. ¿Será el momento de venir a la U, como tantas veces ha dicho? Desde el club azul dan pocas chances.
Udinese, Juventus, Queens Park Rangers, Olympique de Marsella, Cagliari y Fenerbahçe son los clubes de la carrera profesional del chileno Mauricio Isla. En su historial no asoman elencos de su tierra natal y ahora, con su salida casi inminente del conjunto turco, se habla derechamente de que ya es hora de que piense en “debutar” en el país donde se formó. Y claro, en esos comentarios la U siempre aparece como complemento de toda frase que involucra al seleccionado nacional.
No haber jugado en Chile no es la única particularidad de la carrera del Huaso, quien, paradójicamente, tiene el más chileno de los apodos de futbolistas: el lateral debutó en la Selección adulta antes que en el profesionalismo. El defensor se formó en las divisiones inferiores de Universidad Católica, a pesar de ser hincha confeso de la U, el archirrival de los cruzados. A la precordillera llegó como delantero luego de haber sido descubierto por Alfonso Garcés en su natal Buin, aunque con el correr de los años fue retrocediendo en la cancha: del ataque pasó a ser volante por derecha y luego al lateral. “Podría jugar incluso de central”, dijo Miguel Michel González, su DT en el Marsella.
En 2007 y luego de siete años en las series menores fue ascendido por José Guillermo del Solar al primer equipo de San Carlos, hasta donde lo llevaba su abuela. Sin embargo, el anhelado estreno nunca llegó. Cuestionado en ese entonces por no considerarlo para jugar, el Chemo dio sus motivos: "Él no vino a entrenar. Yo las oportunidades se las doy a la gente que se las gana, no las ando regalando", acusó el entrenador justo luego de que el Huaso fuera quizás la máxima figura de Chile en el Mundial Sub 20 de Canadá.
Ese torneo y el quiebre con el técnico peruano significarían el punto de inicio del adiós definitivo de Isla de la precordillera. Udinese puso sus ojos en él, así como también Marcelo Bielsa, quien por ese entonces daba sus primeros pasos en la Roja y quien lo hizo jugar un amistoso ante Suiza el 7 de septiembre de 2007, provocando el estreno en el profesionalismo del Huaso antes que en cualquier club, el que recién llegaría tres meses después, ante Palermo por la Copa Italia.
De la Roja también estuvo divorciado. En la intimidad de Udine, Isla sentía que debía ganar primero terreno en su club. “Uno se da cuenta cuando tiene que estar en la Selección y cuándo no”, decía por ese entonces. Sin embargo, más tarde también confesaría en El Mercurio que Bielsa derechamente lo cansó: “Jugaba por el lado de él y te grita mucho. Sinceramente, no te deja jugar tranquilo”. Fueron unos pocos meses alejado de la selección chilena, a la que volvió para no irse más y anotarse en sus páginas doradas. Ha sido parte de todos los éxitos de ella.
En paralelo, su carrera ha estado marcada siempre por jugar en las mejores ligas de Europa, siendo la Juventus su máximo logro. Pero ya sea estando en Italia, Inglaterra, Francia o ahora último en Turquía, el Huaso siempre ha confesado su amor por un equipo en Chile: la U. Ha dicho en innumerables ocasiones que quiere jugar en buena forma en el Chuncho.
Y esa posibilidad asoma cercana al menos en la logística ahora, justo en momentos en que Fenerbahçe, su actual club, no lo considerará para el regreso a los entrenamientos, toda vez que su vínculo finaliza el 30 de junio.
Él mismo se ha encargado de coquetear con los azules: “Desde chico soy hincha de la U, mi madre es hincha de la U, mi máximo ídolo es Marcelo Salas. Yo nunca debuté en Chile, entonces también tengo las ganas de estar en mi país. Yo me volvería a Chile si un club me hace el ofrecimiento”, dijo sin tapujos a Canal 13 hace apenas dos semanas, antes de saber que el equipo turco no contaría más con él. Su ideal, eso sí, es jugar un año más en Europa o alguna liga competitiva.
En el Centro Deportivo Azul por ahora optan por la cautela. Aunque es un nombre que siempre ha seducido y al que incluso le han abierto las puertas del club para entrenar, dicen haber definido que por la situación financiera que atraviesan debido al coronavirus (y toda la incertidumbre que ello acarrea), no habrán contrataciones a mitad de año. Que según lo determinado, Isla tampoco debiese provocar una excepción, porque hoy están abocados a subsistir.
Por otro lado, en Argentina, medios locales han informado que Boca Juniors está decidido a contratar los servicios del mundialista criollo. Que incluso están dispuestos a igualar o acercarse mucho al sueldo anual que recibe el jugador en Europa, que bordea los 2 millones de euros. En el país vecino, eso sí, la situación financiera no es mejor que la nacional, golpeada también por la crisis sanitaria del Covid-19.
Como sea, el futuro de Isla hoy es incierto. Si bien ha dicho en todos los tonos que la U es su sueño, el escenario económico por la pandemia dificulta cualquier opción. Y es que su arribo implicaría meterse la mano al bolsillo y las medidas de reducción de salario apuntan a todo lo contrario. Como sea, su liberación de Turquía provocará más de una conversación en las huestes azules.
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