Entre despidos y recontrataciones: el lío que enfrenta Desbordes en Santiago con la reorganización del municipio

El aterrizaje de Mario Desbordes (RN) en la Municipalidad de Santiago se siente con fuerza. En menos de un mes de administración ya son múltiples las señales que apuntan a cambiar drásticamente la forma de administrar el municipio, partiendo por las personas que allí trabajan. Desde su llegada a la comuna capitalina el edil inició una serie de cambios en distintas direcciones municipales, argumentando falta de presupuesto para sostener a todos los funcionarios que venían con Irací Hassler (PC).

“Ya sabíamos la pega que había que hacer, lo que estamos dimensionando es la escobita que nos dejó (la anterior administración). Nos dejó una Corporación de Desarrollo Social que, si fuera empresa privada, tendría que quebrar: van cinco meses de cotizaciones impagas, no había plata para sueldos en diciembre (...) En este caso tenemos un aumento de costo enorme en circunstancias que los ingresos bajaron”, ejemplificó Desbordes en una entrevista con Radio Agricultura el jueves pasado.

El tema es que el edil se ha encontrado con dificultades administrativas para concretar todos los cambios y desvinculaciones que anhela.

Por ejemplo, si hace dos semanas se confirmaba una medida que Desbordes había adelantado en entrevista con La Tercera que apuntaba a “poner término al gasto enorme que hay en la oficina de la Igualdad” y que implicó la desvinculación de 39 funcionarios en la Subdirección de Igualdad de Género, el municipio explica a La Tercera que se reincorporaron 20 trabajadores -todos a honorarios y un profesional a contrata-. Según fuentes del municipio, esta decisión fue el resultado de reuniones sostenidas entre el alcalde y los gremios municipales para alcanzar un acuerdo parcial para resolver la controversia que también fue atribuida a un error administrativo.

Aquel error, explicaron a otros medios desde la municipalidad, es que no se habría entregado toda la información en la nómina de funcionarios, particularmente sobre los que el 1 de enero de 2024 ingresaron a formato de contrata tras años trabajando a honorarios. Sin embargo, desde el área de Gestión de Personas del municipio señalan que habían advertido esta situación, responsabilizando a la alcaldía por la omisión.

“Resulta importante mencionar que cada administración municipal realiza los ajustes y reestructuración necesaria, como fue el caso de la Dirección de Desarrollo Comunitario, lo que significó no renovar el contrato de 39 funcionarios, todos a honorario, más un profesional a contrata”, dicen desde el municipio, sumando que “tras una reunión del alcalde con los gremios de la municipalidad, y considerando en esta petición razones humanas, de enfermedad, casos sociales y de certificación especial -como es la oficina de la discapacidad y atención de mujeres que trabajan en VIF-, se reconsideraron 20 profesionales. Esto quiere decir que, a la fecha del 3 de enero del 2025, 20 de esos 39 funcionarios aún forman parte del municipio de Santiago”.

De acuerdo con lo anterior, suma la nueva administración, se están “realizando ajustes en muchas áreas, concordantes con las propuestas que se hizo de cara a la ciudadanía”.

En paralelo, fuentes al interior del municipio, que prefieren mantenerse en el anonimato, indican que tras la llegada de Desbordes comenzaron a circular listas con nombres de funcionarios de diversas direcciones que serían desvinculados, lo que en algunos casos se concretó. Primero se enfocaron en los honorarios y posteriormente en los contratados, incluyendo a trabajadores con 15 o 20 años de experiencia en la municipalidad.

Según explican, esta medida nunca se había visto bajo administraciones anteriores. Agregan, además, que luego de que la alcaldía se diera cuenta de que la medida se tomó sin tener en cuenta la cantidad de años que algunos funcionarios tenían en el municipio, a algunos se les solicitó regresar a sus funciones porque venían trabajando desde al menos dos administraciones y no eran afines a Hassler.

Pero, por otro lado, los profesores de la Dirección de Educación también han elevado su voz en protesta no solo por los despidos a contrata, sino también por la amenaza al término de beneficios adquiridos hace más de 30 años, durante la gestión del exalcalde Jaime Ravinet.

En reuniones con el Colegio de Profesores del territorio, el director de Educación, Humberto Garrido, atribuyó algunas de las salidas a la crisis financiera que vive el municipio, argumentándolo con la baja sostenida en las matrículas. Sin embargo, causó sorpresa entre los asistentes la afirmación de Garrido de que, si se aprueban los bonos que tradicionalmente reciben los profesores y se concreta el traspaso al SLEP Santiago Centro, la municipalidad tendría que seguir financiándolos, una situación que no se ha producido en otros traspasos a nivel nacional.

Garrido -en la convocatoria- se comprometió a presentar una nueva propuesta el miércoles 8 de enero. En privado, desde el Colegio de Profesores advierten que, de no satisfacer sus demandas, esta situación podría derivar en una movilización masiva, marcando otro capítulo de tensión para la administración Desbordes.