El frustrado intento por revivir la emblemática teleserie Ámame

Daniela, quien cursa enseñanza media, se enamora de Luciano, el hijo del dueño de su colegio y quien ronda los 30 años. En agosto de 1993, la teleserie Ámame significó un éxito para TVN, en tiempos donde Canal 13 se imponía con sus ficciones, y marcó dos debut: el de María Eugenia Rencoret como directora general de teleseries y el de Ángela Contreras como actriz, como la colegiala que se enamoraba de un hombre mayor, interpretado por Bastián Bodenhofer.

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A 26 años de esa historia, en Mega hubo intentos por revivir Ámame, en una idea impulsada por Rencoret, quien encargó al equipo de guionistas liderados por Daniela Castagno - quien junto a su padre, el fallecido Néstor Castagno, escribieron la trama en 1993- delinear un boceto imaginando la historia en los tiempos actuales. Sin embargo, el primer esqueleto que entregó el equipo a Mega no gustó: significaba armar todo de nuevo, dice una fuente involucrada en el proyecto, que se presentó el año pasado al canal privado junto a otras dos historias, incluida Yo soy Lorenzo, que fue finalmente la escogida para desarrollar en el horario vespertino.

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La idea de revivir Ámame incluyó que Daniela Castagno registrara la marca a su nombre, luego de que en 1993, y durante diez años, fuera cedida a TVN.

"Se trabajó en función de hacer una versión apegada al espíritu, que incluía a una colegiala y pensábamos que sería un golazo", dice otra fuente involucrada en el remake, que no sería una copia exacta sino el punto de partida para involucrar elementos como las redes sociales y el bullying dentro de la trama. Al interior de Mega explican que la principal razón de descartar la reversión fue la de privilegiar una historia nueva y parte del equipo que trabajo de ese proyecto luego se abocó a Yo soy Lorenzo.

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La teleserie Ámame también significó el éxito de su tema central, Inocencia en tus ojos, del grupo argentino Psycho, quien tuvieron que cambiar la palabra "violencia", como originalmente estaba escrita, por "inocencia", convirtiéndose en un hit radial que hoy aún se recuerda en fiestas kistch.

Con 22 puntos de rating promedio, la teleserie impulsó las carreras de su elenco, pero las grabaciones también quedaron marcadas por una tragedia: el productor de la telenovela, Ricardo Larenas -por entonces marido de la actriz Catalina Guerra-, falleció en un accidente de tránsito camino a Farellones. Su lugar lo tomó Verónica Saquel, quien hoy precisamente trabaja en el área dramática de Mega junto a Daniela Castagno y María Eugenia Rencoret, lo que le daba al remake un tono de nostalgia para las tres, en el que fue su primer proyecto conjunto. Una idea que, asegura una fuente consultada, "podría llegar a concretarse más adelante".

En los 90 las teleseries apuntaban a lanzar a figuras nuevas en roles protagónicos. Fueron los casos de Carolina Fadic, Javiera Contador y Ángela Contreras. Esta última, como la colegiala Daniela en Ámame, tuvo un reconocimiento explosivo que le significó paparazzeos, portadas de revistas, contratos millonarios y nuevos éxitos, como Sucupira y Amores de mercado. Sin embargo, y tras nueve telenovelas, decidió retirarse de la televisión.

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En 2007, mientras grababa Amor por accidente, la actriz tuvo desavenencias con el equipo de producción y los guionistas tuvieron que idear la temprana muerte de su personaje. Desde entonces, Contreras optó por dedicarse a la maternidad –tiene dos hijos, Pedro y Jerónimo-, a competencias de mountain bike y a trabajos de escultura utilizando la técnica de cerámica gres.

Su hermano, el periodista y panelista Cristián Contreras ("Dr. File"), ha hablado sobre el presente laboral de su hermana y ha dicho que la actriz no tiene intenciones de volver a la televisión. "Un día me dijo 'hermano, no voy a hacer más televisión, no voy a hacer más teleseries', las razones fueron varias, primero que se dedicó a sus niños, a cuidar la familia, que para ella es lo más importante", contó el periodista hace unos años, invitado al programa Vértigo.