Kiev, Irpin y Bucha: El recorrido de Rojo Edwards y republicanos por la zona roja de la guerra en Ucrania

Todo comenzó el 13 de mayo. Ese día, el presidente del Partido Republicano, Rojo Edwards -junto a los diputados de la colectividad, Cristián Araya y Benjamín Moreno-, se reunieron con la ministra de Relaciones Exteriores, Antonia Urrejola. Allí los legisladores le transmitieron un plan que tenían en mente y que estaban trabajando sigilosamente: Trasladarse hasta Ucrania, país que se encuentra en medio de una guerra contra Rusia, conflicto que se arrastra hace un poco más de tres meses.

La apuesta no era fácil, pero los parlamentarios tenían contemplado un periplo por Hungría para participar de un seminario conservador, y luego trasladarse a Polonia y después a Ucrania. Así, se coordinaron con el encargado de negocios de Ucrania en Chile, Vladyslav Bohorad, para alistar algunos detalles del viaje al país de Europa oriental, al cual arribaron el lunes de esta semana.

“Somos los primeros latinoamericanos en venir a tratar de defender lo que consideramos la frontera de la defensa de la democracia y los derechos humanos en todo el mundo. La violación de derechos humanos y crímenes de guerra, los bombardeos a colegios, hospitales, casas residenciales, centros culturales que hemos visto son inaceptables. Chile puede y debe hacer más, especialmente si aspiramos a ser parte del Consejo de derechos humanos de la ONU este año. La sola condena de lo que ocurre no es suficiente”, dijo Edwards sobre la visita.

El domingo comenzaron los acercamientos hacia Ucrania. Ese día, Edwards, Moreno y Araya estuvieron en la ciudad polaca de Przemyśl. En ese lugar, se encuentra una de las estaciones de trenes más cercanas a la frontera con Ucrania, y es una de las zonas donde acuden gran cantidad de refugiados ucranianos.

Ese mismo día participaron de una visita a un campamento de refugiados cerca de la frontera con Ucrania, donde -dicen- pudieron conocer de cerca la experiencia de los voluntarios que han estado ayudando a los afectados. Las necesidades de alimentación y bebestibles fueron parte de las conversaciones.

El lunes arribaron en tren a Ucrania. Ahí fueron recibidos por Vitalii Tsymbaliuk, consejero de la Cancillería y exencargado de negocios de Ucrania en Chile; Inna Yaremova, asesora del Parlamento ucraniano; y Yurii Duidin, del Ministerio de Relaciones Exteriores ucraniano. Los tres funcionarios acompañaron a los parlamentarios republicanos durante la gira.

Uno de los primeros recorridos de los legisladores fue por la localidad residencial de Irpin, una de las ciudades que agarró notoriedad luego que se destruyera un puente por donde los ucranianos estaban intentando escapar. Allí pudieron conversar con el soldado voluntario ucraniano Yaroslav Kuts, quien les explicó cómo el sector fue afectado por los bombardeos. Además del puente en Irpin, los parlamentarios pudieron visitar un centro comercial destruido, un establecimiento educacional que sirve como refugio, además de autos alcanzados por misiles.

Según cuentan conocedores de la gira, no hubo mayores complicaciones para el periplo y los parlamentarios no se expusieron visitando zonas actualmente en conflicto.

El mismo lunes se trasladaron hasta Bucha, zona en la que hubo un gran número de muertes ucranianas por parte de las tropas rusas. En esa localidad, Edwards, Araya y Moreno visitaron una iglesia en la que fueron enterrados cerca de 400 personas en una fosa común, luego de haber sido recogidos sus cadáveres de la calle, hechos que levantaron denuncias en contra de los rusos por violaciones a los derechos humanos.

“Chile no puede permanecer indiferente frente a la invasión, los crímenes de guerra, torturas, homicidios y violaciones masivas cometidos por el ejército ruso. Debemos demostrar con hechos concretos nuestro compromiso con la libertad, la democracia y los derechos humanos. En Bucha, Irpin, Gostomil y Makariv se cometió un verdadero genocidio. Vimos directamente las casas, edificios, escuelas, hospitales e iglesias destruidos por los rusos”, sostuvo Araya.

El martes, en tanto, arribaron a la capital ucraniana, Kiev, donde iniciaron las reuniones políticas. Ahí sostuvieron una cita con en el diputado del parlamento ucraniano Artur Gerasymov; el copresidente del grupo interparlamentario de relaciones entre Ucrania y Chile, Serhii Babak y el director nacional del Centro Antártico de Ucrania, Evgen Dykyi.

Más tarde, se juntaron con otros parlamentarios como el presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento, Alexander Merezhko; y el director ejecutivo del Parlamento ucraniano, Viacheslav Shtuchny.

Pero uno de los encuentros más importantes fue con Emine Dzhaparova, la vicecanciller de Ucrania, quien en estos momentos está oficiando como canciller subrogante.

“Acabamos de concluir una reunión con la viceministra de Relaciones Exteriores del gobierno ucraniano. Como parlamentarios fuimos invitados a conocer la realidad y el sufrimiento del pueblo ucraniano. Hoy en día, Ucrania, su gobierno, su gente y su ejército, están en la primera línea de la defensa de los derechos humanos y de la democracia. Chile no puede ser indiferente en esta situación y no basta con simples condenas. Espero que todo el gobierno y el Parlamento se sumen a aumentar y mejorar el apoyo de nuestro país hacia el pueblo ucraniano”, aseguró esta mañana Moreno.

Según transmiten en el Partido Republicano, las reuniones con las autoridades fueron concretadas luego de una invitación del Parlamento ucraniano a los legisladores, tras la coordinación con el encargado de negocios de Ucrania en Chile.