La historia de Tim Walz, el profesor y exentrenador de fútbol americano que será el compañero de fórmula de Kamala Harris

Exentrenador de fútbol americano, profesor de instituto y más progresista que el promedio de los demócratas, Tim Walz, el actual gobernador de Minnesota, es la carta de Kamala Harris para estas elecciones presidenciales en Estados Unidos. Luego de una entrada flash en la campaña, Harris necesitaba un compañero de fórmula que ocupara el cargo de vicepresidente, y dentro del Partido Demócrata distintos gobernadores y parlamentarios aparecieron entre las opciones. Finalmente, Walz fue el elegido.

“Es un honor único en la vida sumarme a esta campaña. La vicepresidenta Harris nos está mostrando la política de lo que es posible”, dijo Walz en su cuenta en X poco después del nombramiento.

La tarde de este martes Harris y Walz aparecerían oficialmente “en vivo” en un mitin en Filadelfia, ante 10.000 personas, para empezar así una gira por siete estados en cinco días, como parte de la campaña presidencial. Hombre de “diplomacia silenciosa”, gestor de pactos y consensos, Walz es conocido también como uno de los gobernadores más comprometidos con el aborto, luego de que una decisión de la Corte Suprema norteamericana anulase ese derecho a nivel nacional.

Presidente de la Asociación de Gobernadores Demócratas, Walz agregará una voz más progresista y a la par con los valores de Harris. Se espera que, con esto, consiga más apoyo por parte de la clase trabajadora blanca en el Medio Oeste norteamericano.

De todos modos, hasta el momento Walz no era una figura central en el debate político norteamericano. Una encuesta publicada esta mañana por NPR, PBS y Marist dio cuenta del gran grado de desconocimiento entre el público sobre el elegido de Harris: un 71% de los adultos nunca había escuchado hablar de él, o no estaban seguros de qué opinaban de él.

Pero Walz rápidamente ha generado revuelo en las últimas semanas por sus mordaces descripciones de los republicanos. “Son raros”, dijo recientemente a MSNBC, un calificativo que se ha repetido ampliamente. “Quieren prohibir los libros. Quieren estar en la sala de examen (del médico)”.

Nacido en West Point, Nebraska, el año 1964, Walz estudió en una comunidad rural. Al terminar su educación consiguió un título en Ciencias Sociales otorgado por la Universidad Estatal Chadron, en Nebraska. De ahí comenzó a trabajar como profesor en una escuela local, se casó y a los dos años partió a vivir en Minnesota.

Entre otras cosas fue el entrenador de fútbol americano de la escuela donde enseñaba, llegando incluso a salir campeón estatal con su equipo en 1999. En su carrera como profesor tuvo la oportunidad de vivir en China, y de hecho habla algo de chino mandarín. A diferencia de Harris y Biden, bautista y católico, respectivamente, Tim Walz profesa la fe luterana.

También se ganó elogios por aceptar ser el asesor docente de la alianza gay-heterosexual de la escuela en un momento en que la homosexualidad estaba en gran medida mal vista, destaca la BBC.

Walz entró en política en 2004, cuando participó como voluntario en la campaña presidencial de John Kerry. Dos años después se presentó como candidato a la Cámara de Representantes por Minnesota, venciendo al republicano Gil Gutknecht, que era, hasta el momento, el titular.

Desde esa posición, y habiendo servido 24 años como miembro de la Guardia Nacional (su padre, administrador de una escuela pública, fue quien lo animó a unirse al Ejército antes de morir de cáncer de pulmón, cuando Walz tenía 19), como representante legisló a favor de los veteranos. Ya en 2018 fue electo gobernador de Minnesota, en un estado donde las dos cámaras legislativas tenían distinto liderazgo: la Cámara era demócrata, y el Senado, republicano.

En ese puesto los logros que más lo enorgullecen tienen que ver con las protecciones al derecho al aborto. Asimismo, promulgó protecciones para los derechos trans, convirtiendo a Minnesota en un refugio para las familias que buscan recibir tratamiento para niños trans. También durante su gestión fueron aprobadas una ley sobre marihuana, la licencia familiar remunerada, el control de armas y las comidas escolares gratuitas.

Pero su primer mandato se vio ensombrecido por la pandemia de Covid y el asesinato de George Floyd a manos de un oficial de policía en Minneapolis. Los republicanos criticaron duramente a Walz por tardar en desplegar la Guardia Nacional cuando algunas protestas se volvieron violentas.

Ya a partir de 2023 se le ve mucho más activo en política nacional, defendiendo las posiciones y acciones de Kamala Harris y Joe Biden. Ese mismo año fue electo presidente de la Asociación de Gobernadores Demócratas.

Ya con la entrada de Kamala Harris a la carrera presidencial Walz había mostrado su entusiasmo, y aseguró haber hablado con ella por teléfono. Este lunes tuiteó: “Gracias por la llamada, @KamalaHarris. Tienes todo mi apoyo”, lo que disparó las especulaciones.

Durante la elección para la carta vicepresidencial, Kamala Harris encontró dos grupos en particular: uno más progresista, que apoyaba la candidatura de Tim Walz, y uno más centrista, más a favor de Josh Shapiro, gobernador de Pennsylvania. Sin embargo, una de las cosas que complicaron a Shapiro tuvo que ver con sus posiciones proisralíes, que acabaron inclinando la balanza por un candidato menos polémico.

Entre sus cualidades se ven buenas dotes para la comunicación, identificación con el público “común y corriente” y buenas relaciones en el Congreso. Asimismo, a sus 60 años, sin ser tan viejo como Donald Trump, se valoró su experiencia en política a la hora de ser escogido para la candidatura.

Una fuente demócrata habló con CNN y señaló: “Harris se sintió atraído por la experiencia ejecutiva de Walz como gobernador y su historial, incluidas sus posiciones políticas sobre licencias pagadas, control de armas, derechos reproductivos y almuerzos escolares gratuitos, así como su capacidad para ser un mensajero eficaz y establecer contrastes con el compañero de fórmula del expresidente Donald Trump, el senador JD Vance de Ohio”.

Aun a inicios de julio, cuando ya se estaba gestando la presión para que Joe Biden abandonase la carrera presidencial a causa del debate con Donald Trump, Walz se mostró menos duro con el mandatario. En una entrevista la semana siguiente al debate declaró que a pesar de lo visto, Biden estaba “en forma para el cargo”. “Ninguno de nosotros niega que el jueves por la noche fue una mala actuación. Fue una mala actuación, por así decirlo. Pero no afecta lo que creo: está cumpliendo”, dijo Walz en esa ocasión.

Entre una de las reacciones a su nombramiento está la excandidata a la presidencia de Estados Unidos Hillary Clinton, que tuiteó: “Estoy encantada de ver a Tim Walz unirse a la lista demócrata. Desde proporcionar comidas gratuitas a los escolares hasta implementar licencias familiares remuneradas en Minnesota, su objetivo es hacer el bien en todas las formas posibles. Será un compañero increíble para nuestra primera mujer presidenta. Vamos a ganar esto”.

Después de que la vicepresidenta Kamala Harris revelara que Walz sería su compañero de fórmula, la campaña de Trump publicó inmediatamente un comunicado en el que atacaba a Walz por ser “peligrosamente liberal”, citando su apoyo a la ampliación de los derechos de voto para exconvictos. La campaña también dijo que su apoyo a la reducción de las emisiones de carbono y al aumento de los estándares de contaminación de los tubos de escape de los automóviles representaba un intento de convertir a Minnesota en California.

“Walz está obsesionado con difundir la agenda peligrosamente liberal de California por todas partes”, dijo Karoline Leavitt, portavoz de la campaña de Trump. “Si Walz no les dice la verdad a los votantes, nosotros lo haremos: al igual que Kamala Harris, Tim Walz es un extremista peligrosamente liberal, y el sueño californiano de Harris-Walz es la pesadilla de todos los estadounidenses”.