La misión más triste de Chadwick

De jeans de color azul y parca negra, raudo y claramente afectado, a las 19:15 de ayer el exministro del Interior Andrés Chadwick llegó a la tenencia de Carabineros de Lago Ranco. Ahí estaba el cuerpo de su primo, el expresidente Sebastián Piñera, quien unas horas antes había muerto luego de que el helicóptero que él piloteaba cayera al agua, en el sector de Ilihue, en la Región de Los Ríos.

El jefe de gabinete de Piñera -quien fue su más estrecho colaborador hasta el estallido social de 2019, donde tuvo que pagar los costos políticos y salir del gabinete- rápidamente tuvo que asumir su misión más triste: ser el encargado de la familia en la coordinación de todos los preparativos para las ceremonias del exjefe de Estado y ser el enlace con el gobierno.

Chadwick -quien estaba en Panguipulli, donde se enteró de la noticia- se trasladó hasta la la casa de bahía Coique del exmandatario donde lo esperaba la ex primera dama Cecilia Morel, y la hermana del exmandatario Magdalena “Pichita” Piñera, quien era otra de las tripulantes del helicóptero que capotó, pero que -junto a Ignacio y Bautista Guerrero- logró sobrevivir y nadar hasta la orilla del lago.

El liderazgo innato y experiencia política de Chadwick lo hicieron ser el encargado natural para asumir este rol. Por lo mismo, rápidamente se puso en contacto con varias exautoridades de la administración de Piñera.

En esa misión ha mantenido contacto con el canciller Alberto Van Klaveren, quien fue designado por el Presidente Gabriel Boric como el ministro a cargo de coordinar el itinerario de los tres días de luto nacional.

En esas tareas de coordinación lo ayudan el exministro vocero Jaime Bellolio; la exjefa de comunicaciones de Piñera Carla Munizaga; entre otros excolaboradores del expresidente.

Chadwick, de hecho, se sumó ayer, pasadas las 20.00, a un zoom con el titular de Relaciones Exteriores para organizar los honores que durante este miércoles, jueves y viernes, recibirá el fallecido exmandatario.

Así, el extitular del Interior tuvo que volver a activarse y aparecer en la esfera pública tras su salida del segundo gobierno de Piñera, el 28 de octubre de 2019, en medio del estallido social.

Ambos veraneaban juntos desde temprana edad y de adultos consolidaron su cercanía, la que se afianzó aún más en La Moneda, donde fue estrecho colaborador en sus dos gobiernos: primero al mando de la Secretaría General de Gobierno y en Interior; y, en la segunda administración, a cargo del Ministerio del Interior (desde el 11 de marzo de 2018 al 28 de octubre de 2019).

La salida de Chadwick del gabinete fue la más dolorosa y difícil para Piñera, quien se resistía a dejarlo partir. No solo representó un golpe máximo a su núcleo de confianza, sino que también refrendó la idea de que su segunda administración sería muy distinta a la que había planificado.

Pero ese no fue lo único que afectó a Piñera. Poco más de un mes después de dejar oficialmente su cargo en Interior, el 11 de diciembre de 2019, el Senado aprobó por 23 votos a favor y 18 en contra la acusación constitucional en contra de Chadwick, quedando inhabilitado para ejercer cargos públicos por cinco años.

En él recayó la responsabilidad política de las acusaciones de violaciones a derechos humanos ocurridas durante la revuelta social.

La preocupación del expresidente -que aumentó después de que el 29 de noviembre el libelo sorteara la Cámara de Diputados- fue tal que, cuando la situación era inapelable, tomó el teléfono e hizo gestiones directas con senadores de oposición.

Tras la aprobación del libelo, a través de sus redes sociales, el exmandatario señaló: “Todo mi apoyo, cariño y solidaridad al exministro Andrés Chadwick. Un gran servidor público, con sólidos valores y una inmensa vocación de servicio por los demás” y agregó que es “un hombre honesto y generoso y una persona íntegra y buena. Andrés: gracias, muchas gracias!”.

Por su parte, Chadwick también le agradeció: “Muchas gracias a mis excolegas por ese cariño y respaldo, y muy especialmente al Presidente de la República, Sebastián Piñera, por la confianza que él depositó en mi persona para haber ejercido el cargo de ministro del Interior, pero mucho más importante que eso, por su preocupación permanente y cariño durante todos estos días de la tramitación de esta acusación constitucional”.

Aunque desde ese momento la vida pública de Chadwick -quien hoy es decano de la Universidad San Sebastián y sigue influyendo en su sector político- pasó a segundo plano, Piñera nunca dejó de llamarlo para pedirle su opinión hasta que concluyó su segundo gobierno. Y, hoy tras su fallecimiento, el extitular del Interior tuvo que volver a aparecer en la primera línea.