La transformación del Liceo 7: mañana debutan los primeros cursos mixtos

Lo que se vivirá este jueves en el Liceo 7 de Providencia es historia pura. O un quiebre en la misma. Por primera vez, más de cien estudiantes hombres cruzarán las puertas de un recinto educacional que por casi ocho décadas solo ha visto mujeres.

Para ello, en 2019 se votó un cambio que recién este 2021 verá la luz: el tradicional liceo de niñas ahora pasa a ser mixto, con una primera generación de varones que ingresará a 7° básico. Así, el 50% de los alumnos de los cinco cursos del nivel serán hombres.

Agustín, de 12 años, es uno de ellos. “Estoy un poco nervioso, pero más que eso, entusiasmado por la entrada a este liceo, tan emblemático y que siempre había sido de mujeres”, dice el adolescente.

Maritza Amaro es la directora del establecimiento y admite algunas aprensiones sobre esta nueva realidad: “Los jóvenes tienen impregnada la convivencia mixta. Somos los adultos a los que nos cuesta un poco más el cambio”, dice.

Amaro asegura que la sociedad misma ha ido exigiendo cambios. Incluso, cuenta que hace unos años el recinto cambió el nombre de “Liceo 7 de Niñas Luisa Saavedra de González” a “Liceo 7 Luisa Saavedra”, a secas, pues contaban con estudiantes transgénero. “Somos formadores y tenemos que acompañar a los jóvenes en los cambios. Esta es una necesidad social. Yo hablaría de un nuevo comienzo en conjunto de hombres y mujeres”.

María Teresa González, profesora de Matemáticas del recinto, concuerda: “Aunque creo que los liceos emblemáticos de mujeres potencian y empoderan a las estudiantes, y de paso a la causa feminista, el mundo cambió, y tal como lo hicimos con la inclusión, era el momento de que incluyéramos a los varones. Además, era un anhelo de los apoderados que querían tener a sus hijos/as en el mismo liceo”.

Mismo sentir refleja Marcela Catoni, expresidenta del Centro de Alumnas en 2019: “El Liceo 7 se está adaptando a los cambios, a los nuevos espacios, a las nuevas situaciones del país. Un liceo mixto es lo que la sociedad está esperando”.

Con ella a la cabeza, fueron las mismas estudiantes las que votaron el cambio, para luego ratificarlo en una mesa de trabajo en la que los representantes de cada estamento (además de ellas, los asistentes a la educación, profesores, apoderados, cuerpo directivo y la Corporación de Desarrollo Social de Providencia) hacía valer sus respectivas votaciones internas. El resultado fue un 4-2 en favor de la conversión.

En esa mesa estaba Catoni. “Es un hecho inédito y muy esperado. Desde 2018 que llevamos trabajando con profesores, cuerpo directivo, estudiantes y la municipalidad este cambio”, recuerda.

“Existe nerviosismo, pero estamos bien, porque las alumnas optaron por esto y la mayoría coincidió en que era una muy buena alternativa. Eso nos da la tranquilidad de que mi hijo va a tener una muy buena acogida por parte de las alumnas antiguas”, expone Mónica Leiva, madre de Agustín. Justamente, fueron las estudiantes las primeras en plantear, en 2018, la idea de ser mixto.

“Esta semana será histórica para la educación municipal de Providencia. Que este 2021 (el Liceo 7) se transforme en mixto me llena de alegría y satisfacción, principalmente porque fue la propia comunidad escolar la que solicitó este cambio, y nosotros, como municipalidad, felices de que se haga realidad, ya que soy una ferviente defensora de la educación mixta”, afirma la alcaldesa Evelyn Matthei. Se trata del tercer liceo emblemático de esta comuna que pasa a recibir a ambos sexos: en 2018 lo hizo el Arturo Alessandri Palma y, al año siguiente, el Lastarria.

Transformar a mixto el Liceo 7 implicó adaptaciones: se cambiaron baños y camarines y se hizo una redistribución del espacio.

“Pero el cambio lleva también a que profesores y directivos se preparen, a que cambien su mentalidad, a que trabajen el machismo o expresiones que se daban en un espacio femenino, pero que no estaban bien. Ahora hubo mucha capacitación para que se adaptaran a este cambio”, valora Catoni.

La profesora “Tere”, como se le conoce en el liceo, aporta su mirada: “Como todo, es una oportunidad. Y los docentes que harán clases en los séptimos están muy ilusionados. De hecho, hay varios que siempre hicieron clases en colegios mixtos y lo distinto era nuestro liceo, solo de mujeres”.

Es por razones como esas que Mónica, la madre de Agustín, optó por el Liceo 7 para su hijo, quien dio una prueba de selección online debido a la pandemia, pero que tras ello vivió un proceso normal de ingreso. La idea es normalizar que ahora el colegio de Providencia será mixto.

“El Liceo 7 es emblemático, de excelencia. Y estamos totalmente a favor de la modalidad mixta. Siempre hemos pensado, y también Agustín, que es una muy buena alternativa”, dice la apoderada.

La madre, eso sí, asegura que su hijo y ella misma saben de la carga histórica que tendrán los primeros varones que crucen por las puertas de calle Monseñor Sótero Sanz. “Está consciente de que es un peso bastante importante, porque, además, van a estar puestos todos los ojos encima de ellos los primeros días para ver cómo resulta. Son, entre comillas, la novedad”, asegura.

En ese sentido, la directora Amaro cierra con su deseo para esta nueva era que le toca liderar: “El Liceo 7 siempre avanzando, como dice el grito. Siempre avanzando en conjunto, ya no solo mujeres, sino que con hombres”.