¿Le afecta o no en la presidencial? La crujidera que se desató en Chile Vamos en el tránsito de Matthei para respaldar la previsional

A mediados de diciembre, en una cita con los diputados de su partido (la Unión Demócrata Independiente, UDI), Evelyn Matthei manifestó su “carta blanca” a los senadores que negociaban la reforma de pensiones. Sin embargo, el post que publicó el 22 de diciembre en la red social X remeció el tablero.

“Es importante mejorar las pensiones y solucionar la condición injusta en que se encuentran hoy las mujeres. Sin embargo, después de leer el segundo informe de la mesa técnica observo que varios de sus contenidos pueden traer consecuencias graves no buscadas. Iniciaré conversaciones con algunos economistas y otros expertos para poder aportar a la búsqueda de respuestas a los chilenos”, escribió.

El golpe de timón de la exministra de Trabajo remeció a Chile Vamos, pues no conocieron de manera previa sus declaraciones, como sí había ocurrido en otras oportunidades. El entusiasmo manifestado por el senador y presidente de la Comisión de Trabajo, Juan Antonio Coloma, o el timonel de Renovación Nacional (RN), Rodrigo Galilea, distaba de la preocupación expuesta por Evelyn Matthei. Este último fue el que se mostró más contrariado tras la postura manifestada por la exalcaldesa y, afirman, conversaron luego de la publicación.

El hecho que es claro es que la candidata de la UDI y RN no siempre tuvo convencimiento pleno de apoyar la reforma. Y en su entorno, igual. En Chile Vamos señalan que para sus consejeros políticos y económicos de mayor ascendencia, como el exsubsecretario Rodrigo Ubilla, y en sus equipos de asesores más cercanos, en un comienzo creían que acordar con el Ejecutivo una reforma solo podría significar un flanco para la exalcaldesa en el electorado de derecha. Esto porque se le estaría dando “aire” a la administración de Gabriel Boric y podría existir un costo electoral para Matthei.

Por lo mismo, algunos de los que se oponían a la idea de un acuerdo intentaron persuadir, sin éxito, a los negociadores: Coloma, Galilea y Luciano Cruz-Coke. Todos ellos, con mayor énfasis Galilea, defendieron el pacto y dijeron que sería positivo para Matthei a futuro, y que la ciudadanía se convencería de eso.

Y ya con el acuerdo corriendo, varios del sector le recomendaron a la abanderada que, si iba a respaldar el acuerdo, lo hiciera marcando las alertas rojas que ellos veían y que ella misma compartía. Así, dicen las mismas fuentes, se originó la primera publicación por sus redes sociales.

Así, la exjefa comunal levantó sus alertas en tres puntos específicos: que el déficit fiscal para financiar la reforma fuera demasiado grande, que la licitación de la cartera de afiliados terminara siendo expropiatoria, y que la idea del préstamo al Fisco terminara siendo otro mecanismo de reparto. Un cuarto punto en discusión era si Chile Vamos iba a acudir en unidad a una reforma que, por esos días, se había complicado para la derecha por el uso de la palabra “reparto” por parte del presidente de la UDI, Guillermo Ramírez al hablar de la fórmula de 0,5 puntos compensatorios entre hombres y mujeres.

Y aunque el timonel reconoció el error en el uso del concepto, para muchos -y para la propia Matthei- la idea de “capitalizar” un porcentaje de los cotizantes hombres en las cuentas de las mujeres, sí correspondía a un mecanismo de reparto.

De todas formas, en el sector nunca fue una opción desechar una fórmula de compensación para las pensionadas mujeres.

Así, en una de las tantas conversaciones entre Matthei y los negociadores comenzó a tomar fuerza la idea del préstamo como una solución “fuera de la caja”, y sostenible institucionalmente si esta funcionaba tal como los bonos de reconocimiento que han pagado las administradoras de fondo de pensiones (AFP) a los afiliados que migraron del sistema antiguo al de capitalización individual.

En su entorno advierten que Matthei nunca desechó la idea de arribar a un acuerdo, y que en más de una ocasión transmitió que la posición de Chile Vamos tras las elecciones territoriales era privilegiada frente al gobierno. Sin embargo, las advertencias de la mesa técnica hicieron que -además de sus cálculos personales- recalcara en más de una ocasión a los senadores y a Ramírez -con quien tiene una relación cercana- el revisar las veces que fuera necesario los cálculos fiscales.

Por eso mismo, al timonel UDI se le vio como oyente cuando fue a exponer el Consejo Fiscal Autónomo cuando la reforma aún estaba radicada en el Senado. De las 16 recomendaciones emanadas de dicha instancia se acogieron 15, y -afirman- eso fue determinante para que de ahí en adelante la candidata se mantuviera al margen hasta este jueves, en que manifestó su conformidad con el acuerdo.

De todas formas, advirtió futuros aspectos de mejora, pensando en un eventual gobierno donde su sector regrese a La Moneda, con ella a la cabeza. “Hay un enorme desafío, y ese es el que tendrá el próximo gobierno: implementar correctamente la reforma, pero también corregir y mejorar lo que sea necesario. Tenemos que volver a crecer al 4% y salir de un estancamiento que impide mejoras sociales que el país necesita”, escribió en X.

Más allá de los cálculos económicos, en su entorno también pesó el cálculo político para decidir. El primer check es que tras la votación, pese a los descuelgues en las bancadas de RN y la UDI, la coalición no se fracturó. Además del respaldo de economistas como Klaus Schmidt-Hebbel y las más recientes declaraciones de personeros “más duros” como Bernardo Fontaine -quien no está del todo conforme con la reforma previsional-, el que afirmó que “el préstamo no es reparto”. Un factor clave para la abanderada de la UDI y RN.

En todo caso, la jefa de bancada de RN, Ximena Ossandón, reconoció hace algunos días, en diálogo con radio Agricultura que, cuando se vean los resultados de la reforma, la percepción del votante de derecha más en contra de los ajustes va a cambiar. Aunque en el intertanto podía ser duro, por el cruce de opiniones en el mundo de derecha.

“Cuando esto (la reforma) empiece a funcionar, esto va a cambiar (…). Va a ser duro, y puede ser que a Evelyn Matthei también le afecte, pero te aseguro que antes de que venga la presidencial el escenario va a estar mucho más despejado, porque se van a ir conociendo los detalles”, afirmó.

En la misma emisora, el excandidato a gobernador de la Región Metropolitana Francisco Orrego (RN) advirtió que la puesta en escena del Ejecutivo fue de triunfo, y que ello podría impactar en las opciones de Chile Vamos de llegar a La Moneda.

“Hay cosas buenas y cosas malas (…). Pero la foto que yo vi en la mañana es de derrota. Y la izquierda celebra (…). No voy a renunciar a Chile Vamos, porque los cobardes renuncian. Yo jamás he sido cobarde y yo voy a estar apoyando a Evelyn Matthei porque soy un tipo de frente, voy a cumplir con mi palabra. Pero no neguemos la realidad, y la realidad es que hoy día para nosotros es más difícil ganar la presidencial que ayer”, afirmó.