La mañana del jueves, el excandidato presidencial y alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, transmitió un mensaje de audio a un grupo de militantes del Partido Comunista (PC) en un chat. En la comunicación -a la que accedió La Tercera- redoblaba la presión interna y llamaba a desdramatizar el no firmar un -eventual- acuerdo constituyente. Todo eso, a horas del comité central “extraordinario” del PC para afinar su postura en las negociaciones constitucionales y justo en horas donde un órgano mixto comenzaba a ganar terreno.

“Todavía no entiendo, compañeros y compañeras, ¿cuándo le empezamos a tener tanto temor a andar solos durante un tiempo por el camino de la política en nuestro país? La verdad es que no me siento solo si no firmamos un acuerdo que traiciona el mandato del pueblo que nos escogió y al que decimos representar”, dijo el alcalde.

“El escenario de la realpolitik o de la política de lo posible solo nos encadena a siempre trabajar para los que no quieren que haya cambios, a los que terminan adorando a los golpistas”, continuó.

Jadue dijo a los militantes PC que “yo, la verdad, es que prefiero pasar el tiempo de la derrota en nuestra trinchera hasta que se recomponga el escenario, pero pensar que el único escenario a disputar es el que me impone la derecha, creo que no es correcto. Los escenarios son múltiples y uno es efectivamente, al igual que el 15 de noviembre, no firmar y esperar que nuevamente hayan condiciones para impulsar cambios de verdad”.

Detrás de las palabras del alcalde hay un diagnóstico crítico a la gestión del gobierno de Gabriel Boric. De hecho, no solo en el PC, también en otras tiendas oficialistas existe el temor de que la actual administración -con una popularidad que ha decaído por temas económicos y de seguridad- podría transformarse en un “lastre” si es que las fuerzas de izquierda se presentan a un proceso eleccionario, debido al fenómeno del “voto castigo”.

Según presentes, el alcalde no se guardó su postura y la hizo pública durante el comité que se extendió por casi ocho horas. Las mismas fuentes comentan, eso sí, que el respaldo fue acotado al círculo del partido que es cercano al edil.

A la cita extraordinaria del PC, además de los miembros de la máxima instancia partidaria, también se convocó a invitados como la senadora Claudia Pascual -quien no es parte del comité central ni de la comisión política del partido- en su calidad de representante en la mesa negociadora. El informe político respecto de las negociaciones, eso sí, estuvo en manos de Carmona, quien ha acudido a las últimas tratativas. Quienes lo escucharon aseguran que fue “pormenorizado y detalladísimo”, dando cuenta de cada una de las posturas que había presentado tanto la oposición como el oficialismo.

La instancia, eso sí, tuvo una ausencia notoria: el presidente de partido, Guillermo Teillier. Desde hace varias semanas, el dirigente de 79 años se ha visto afectado por las consecuencias de una neumonía que lo han llevado a dejar de acudir al comité político de La Moneda e incluso a dejar las negociaciones en manos de Pascual y, más recientemente, en Lautaro Carmona. Tras las palabras de este último, no fueron pocos los asistentes que se anotaron para dar su parecer sobre el curso de las tratativas. Y si bien se había estipulado dar fin al encuentro por Zoom a las 14.30 horas, la instancia partidaria se extendió hasta más allá de las 17.00 horas.

La mayoría de las palabras apuntó a permanecer en la postura que el partido ha defendido durante todo el proceso, que es el órgano 100% electo. Incluso -y según se reflejó en varias intervenciones- el número puede variar o ser flexible, mientras se mantenga ese principio o “línea roja”, como han definido algunos personeros.

Sin embargo, algunos fueron más allá y plantearon una postura que ya ronda en la mesa negociadora en voz de la líder PS, Paulina Vodanovic: que exista un plebiscito de entrada si es que la mesa concluye sin acuerdo. Aunque varios son reacios a esa postura -principalmente entre los militantes que son autoridades de gobierno-, pues podría propinar una nueva derrota electoral al gobierno del Presidente Gabriel Boric.

La cita finalizó con una resolución -comunicada la mañana de este viernes por Carmona- que reafirma la postura que el partido ha defendido en los últimos tres meses de negociación: un órgano 100% electo. Conocedores de la trastienda de la redacción, señalan que el espíritu apunta a hacer el “máximo esfuerzo” para que dicha postura prevalezca, pero sin perjuicio de explorar todas las fórmulas.

Y es que de todas formas, si el acuerdo deriva en un órgano mixto -donde el oficialismo ha recalcado no tener piso entre sus parlamentarios para que así sea-, Carmona tendría que hacer una corroboración final para acudir (o no) con su firma al acuerdo. El mecanismo para una consulta “de emergencia” no está sellado: podría convocarse a la comisión política del partido o a una consulta rápida del mismo comité central.

Otra de las conclusiones es que una vez que -eventualmente- se reinicie el proceso, los exconvencionales constituyentes -liderados por Marcos Barraza- se reunirán periódicamente para dar apoyo de contenido y debate al partido.