Antes del mediodía de este lunes el subsecretario de Redes Asistenciales, Fernando Araos, tuvo que responder al menos tres veces a la misma pregunta: ¿Presentará su renuncia y asumirá la responsabilidad política por los errores que han cruzado la crisis por el colapso del sistema de salud a propósito de los virus respiratorios?

La respuesta que ha ensayado ha sido la misma: por ahora, seguirá a la cabeza de la contención del complejo momento que enfrenta el país y que tuvo su punto más crítico la semana pasada con el fallecimiento de una lactante en San Antonio en medio de la falta de camas críticas. Tanto él como la ministra de Salud, Ximena Aguilera, han sido cuestionados por su gestión de la crisis y este fin de semana sumaron un nuevo capítulo de contradicciones. Pese a todo, en La Moneda transmiten que no es momento de remover a ninguno de los dos. Al menos no por ahora.

En Palacio admiten que las situación de ambas autoridades es compleja. Sin embargo, se considera que una eventual salida no ayudará a mejorar la situación política ni sanitaria. De hecho, en el gobierno anticipan un peak en los próximos días y, por lo mismo, el análisis que hasta ahora ha primado es resistir y evaluar día a día el desempeño de Araos y Aguilera.

En el gobierno señalan que el Presidente está muy preocupado con esta situación. De hecho, la ministra Aguilera fue citada al comité político que lideró esta mañana el Mandatario, donde abordaron el estado de situación del sistema de salud y los próximos pasos que dará la cartera. De manera poco usual, los equipos del Jefe de Estado no hicieron imágenes de la cita, las que tradicionalmente comparten con la prensa tras la reunión. Los ánimos en el encuentro no eran los mejores tras un fin de semana en que el Minsal volvió a enredar las cosas.

A las declaraciones de la semana pasada de la ministra Aguilera -quien aseguró que, de haber habido una cama disponible, la lactante fallecida de todas formas no hubiese sobrevivido-, se sumaron las intervenciones contradictorias de la ministra de Salud y del subsecretario Araos respecto de si se le solicitaron o no camas a la Clínica Las Condes.

Araos afirmó el miércoles pasado que el gobierno había tomado contacto con la Clínica Las Condes, siguiendo los protocolos en el marco de la emergencia sanitaria, para hacer traslados de pacientes del sistemas público. El jueves, el director de dicho centro asistencial, Rodrigo Mardones, contradijo al subsecretario. “No hemos recibido pacientes del servicio público”, dijo en CNN Chile.

Tratando de salir al paso de la información inexacta que entregó a Araos, la ministra Aguilera aseguró ayer que efectivamente no se contactó a la Clínica Las Condes para el traslado particular de la lactante fallecida la semana pasada, lo que admitió como un error, aunque justificó aquello señalando que la decisión se toma por un supuesto dictamen de la Contraloría que lo impedía. Con un desmentido del ente liderado por Jorge Bermúdez de por medio, el Minsal tuvo que salir a aclarar que se trató de una “confusión involuntaria” lo expresado por la secretaria de Estado y que se refería a una “inhabilidad de la CLC para suscribir contratos con el Estado por un periodo de dos años, es resultado de la declaración de la justicia laboral por haber constatado vulneración de derechos de los trabajadores”.

Esa explicación -sin embargo- volvió a ponerse en entredicho esta mañana cuando la propia Aguilera aseguró que la situación se había corregido y que “más adelante se verán las responsabilidades”. Araos, por su parte, tuvo que salir a dar un punto de prensa admitiendo que fue mal informado y que por eso afirmó que sí habían habido traslados a ese centro asistencial. En la oportunidad anunció un sumario administrativo para identificar las responsabilidades.

“Existe un protocolo que está aprobado por el Ministerio de Salud que instruye el adecuado funcionamiento y la búsqueda de camas en el contexto de la alerta sanitaria. Dicho protocolo dice claramente que hay que utilizar, llamar y consultar por la disponibilidad de las distintas camas tanto en el sector público como en el sector privado. Independiente de si existiesen o no convenios. En este sentido, dado que no consta la llamada a Clínica Las Condes es que hemos tomado la decisión de instruir una investigación sumaria para esclarecer los hechos de por qué sucedió esta situación. Además hemos instruido una auditoría administrativa urgente con el objetivo de revisar el 100% del proceso para identificar las mejoras que tenemos que hacer a la brevedad posible”, dijo Araos.

Y agregó: “Fui informado que dicho protocolo se había ejecutado tal cual está instruido y en esta materia fue lo que transmití hacia la opinión pública en los medios de comunicación. Al pedir los detalles de todos los contactos que se realizaron y de los registros pudimos constatar de que no existieron registros de llamados a Clínica Las Condes. Ante esta situación he decidido tomar las medidas administrativas necesarias para esclarecer el hecho y las causas con el objetivo de poder dilucidar por que no se llamó a Clínica Las Condes. Quiero decir que en dicho procedimiento se llamó al resto de clínicas y de hospitales públicos del país y de hecho consta en los registros aquello”.

Hasta ahora, La Moneda ha dado varias señales en línea con que las autoridades a cargo de la crisis están agotando su línea de crédito. La ministra Carolina Tohá (Interior) dijo esta mañana que “aparentemente hay un error, no se debe anticipar un juicio, pero se debe investigar bien, y si alguien se equivocó, saber quién fue y si corresponde, que sea sancionado”.

Mientras que la ministra Camila Vallejo (Segegob) afirmó sobre la situación de Araos que “¿en qué pie queda? Bueno, en el pie de trabajar con alta y mayor rigurosidad en el enfrentamiento de esta emergencia. El Presidente cuando señala que no hay más espacio a errores justamente es un llamado a ser más rigurosos en nuestros trabajos, independientemente al caso de Salud”.

El ministro Álvaro Elizalde (Segpres), por su parte, fue en la misma línea y reconoció que lo ocurrido se trataba de una equivocación, aunque advirtió que no tenía sentido “seguir ahondando en esa controversia”.

Si usted no renuncia va a haber una acusación constitucional en contra de la ministra Aguilera. ¿Por qué ella va a tener que pagar los platos rotos?

Esa fue la pregunta que le hizo esta tarde el senador Sergio Gahona (UDI) al subsecretario Araos. El momento fue incómodo. La ministra de Salud se encontraba a su lado. Ambos habían asistido a la Comisión de Salud del Senado justamente para dar cuenta de la crisis.

El senador aludía al ánimo que se está instalando en la Cámara de Diputados para impulsar un juicio político en contra de la titular del Minsal. Esta mañana el jefe de bancada de la DC, Eric Aedo, aseguró que “hay elementos para avanzar en una acusación constitucional contra el equipo de salud” y que “la situación del subsecretario Araos se hace muy insostenible”.

Desde la UDI, sin embargo, tomaron distancia de la postura que también ha defendido el Partido Republicano y señalaron que no sería justo que la ministra Aguilera asuma los costos.