PC amarra su destino al gobierno y un comunista asume por primera vez jefatura de Ministerio de Educación

Porteño, hincha de Santiago Morning y profesor de Historia y Ciencias Sociales, el nuevo ministro de Educación, Nicolás Cataldo (PC), no es precisamente un debutante en su cartera.

Fue subsecretario de Educación entre marzo y septiembre de 2022 y desde ese cargo le tocó asumir en algunas ocasiones como ministro subrogante ante ausencias temporales de Marco Antonio Ávila (RD), quien hoy dejó el Mineduc.

Sin embargo, su asunción como titular de esta secretaría de Estado marca un hito histórico y un gesto particular para el Partido Comunista, colectividad que en los últimos meses venía manifestando un creciente malestar con el derrotero del gobierno del Presidente Gabriel Boric, especialmente con la agenda de seguridad y la demora de los compromisos sociales.

Hoy el Mineduc es la cartera con el mayor presupuesto del gobierno, con más de 14 billones de pesos ($14.074.314.043.000).

Además, por primera vez en sus 111 años de historia, el PC estará a cargo de un ministerio y un sector con el que ha tenido una estrecha vinculación y una vocación especial en su acción política.

La misma historia personal de Cataldo es muestra de ello. Tras ingresar a los 14 años a la Juventudes Comunistas y luego estudiar Pedagogía en la Universidad de Valparaíso, trabajó como asesor técnico del Departamento de Educación y Perfeccionamiento del Colegio de Profesores y fue parte del equipo editorial de la Revista Docencia.

Después, en 2013, asumió como asesor legislativo en Educación de la bancada de diputados del PC.

En 2014 fue fichado por la recién electa diputada Camila Vallejo (PC) como jefe de gabinete y continuó apoyando el trabajo legislativo en el mismo ámbito. Vallejo había sido presidenta de la Fech y una de las líderes del movimiento estudiantil de 2011, por lo que las reformas educacionales, destinadas a combatir el lucro, terminar con la selección y fortalecer el financiamiento del sistema público, eran su principal preocupación.

Según detallaba su misma biografía, en la Subsecretaría de Desarrollo Regional, donde ejerció como titular hasta hoy, durante la segunda administración de la Presidenta Michelle Bachelet, entre los años 2015 y 2018, Cataldo trabajó en el equipo legislativo del Ministerio de Educación, involucrándose en la tramitación de proyectos de la Reforma Educacional.

“Valoramos profundamente el nombramiento de Nicolás Cataldo... Creemos que entre todas y todos podamos retomar una iniciativa política, que ponga en el centro a la Educación como uno de los pilares de reformas estructurales... Estamos muy contentos y contentas y, a la vez, muy desafiados y desafiadas”, dijo la diputada Daniela Serrano, presidenta de las Juventudes Comunistas.

Además de la marca histórica de llegar al Mineduc, para el PC implica adquirir un mayor compromiso con el gobierno del Presidente Gabriel Boric, donde ya dos de sus militantes, Camila Vallejo y Jeannette Jara, ejercen en el Ministerio Secretaría General de Gobierno (Segegob) y en el Ministerio del Trabajo y Previsión Social, respectivamente.

Ahora serán tres ministerios, misma cantidad de carteras que ocuparon los comunistas en los primeros cinco meses del gobierno del Presidente Gabriel González Videla (noviembre de 1946 a abril de 1947) y en los tres años de la administración del Presidente Salvador Allende (1970-1973, donde no estuvieron siempre en las mismas carteras, salvo en el Ministerio del Trabajo).

La llegada de Vallejo a la vocería (la Segegob), un ministerio que es parte del comité político de La Moneda (máxima instancia resolutiva del gobierno), ya era un paso histórico. Nunca un militante comunista (ni con González Videla ni con Allende) había ejercido en el “centro de gobierno” (concepto usado en la ciencia política para definir el principal grupo de decisiones de un Ejecutivo).

Este peso se reforzó con la incorporación de Jara al comité político, en septiembre de 2022, como gesto de compensación de Boric al PC, luego de la frustrada designación del mismo Cataldo como subsecretario del Interior, producto de sus antiguos tuits y expresiones en contra de Carabineros.

Por ello, el regreso de Cataldo al Mineduc, ahora como ministro, es un peldaño más del peso que han adquirido los comunistas en el actual período presidencial, en el que han tenido que acomodar su histórica postura: la tesis “con un pie en la calle y otro en el gobierno”, que levantó su presidente, Guillermo Teillier, en la segunda administración de Bachelet, de la que también fueron parte.

A diferencia del mayor involucramiento que han tenido que asumir en el mandato de Boric, en los tres gobiernos anteriores en los que han participado (en Bachelet II, en la UP con Allende y con González Videla), los comunistas habían optado por roles de segundo orden político, lo que les permitía tener flexibilidad para tomar distancia de decisiones que no compartían, especialmente en materia económica y en seguridad y orden público.

Por ejemplo, en 2013, pese a que el PC apoyó la candidatura presidencial de Bachelet desde un principio y fue fundador de la Nueva Mayoría, recién acordó ponerse a disposición de la entonces Presidenta electa una semana después de la segunda vuelta, en un comité central realizado entre el 20 y 21 de diciembre de ese año.

Entonces el PC no puso exigencias, pero priorizó su interés en carteras sociales, como los ministerios del Trabajo y de la Mujer. Al final, Bachelet nombró a Claudia Pascual en la Secretaría de la Mujer. En Trabajo, en tanto, el PC accedió a la Subsecretaría de Previsión Social con Marcos Barraza, quien al año siguiente se convertiría en titular de Desarrollo Social. Ellos fueron los únicos ministros comunistas que tuvo Bachelet en su mandato.

Si bien Barraza tenía su oficina en La Moneda, no era parte del comité político (el titular de esa cartera sólo tuvo una fugaz incorporación en el principal núcleo del Ejecutivo en el segundo mandato de Sebastián Piñera).

Durante el gobierno de Allende (1970-1973), tampoco encabezaron un ministerio político. En esos años, las carteras políticas eran tres: Interior, Secretaría General de Gobierno y Relaciones Exteriores, que funcionaba en La Moneda. No existía la Secretaría General de la Presidencia, que fue creada en 1990.

Si bien durante la UP los comunistas encabezaron el Ministerio de Hacienda, entre 1970 y 1972, esa secretaría de Estado no tenía el peso político que adquirió después de 1980. Incluso, fue Ricardo Lagos, en 2000, quien incorporó a Hacienda dentro del comité político. En el gobierno de la Unidad Popular, además ejercieron las carteras de Trabajo, Economía (después de dejar Hacienda), Obras Públicas y Justicia (cartera que ocuparon al abandonar OO.PP.).

En el período de González Videla, los comunistas solo ocuparon tres carteras: Obras Públicas, Agricultura y Tierras (hoy Bienes Nacionales), hasta que rompieron su alianza con el Mandatario, en abril de 1947.